Justo Pastor Lozada
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Datos generales
Nombre Justo Pastor Lozada
Fecha de nacimiento 24 de noviembre de 1904
Nacionalidad Colombiana Bandera de Colombia }}
Ocupación Litógrafo
País de nacimiento Colombia Bandera de Colombia }}
Ciudad de nacimiento Bogotá
Fecha de fallecimiento 12/12/1885
País de fallecimiento Colombia Bandera de Colombia }}
Ciudad de fallecimiento Bogotá
Familia José Vicente Lozada (padre); Isabel Jordán Villamarín (madre)

Biografía

Litógrafo nacido en Bogotá, 1790, muerto en la misma ciudad, el 12 de diciembre de 1885. Hijo de José Vicente Lozada, alcalde de la Cárcel Chica, e Isabel Jordán Villamarín, Justo Pastor Lozada estudió pintura con Victorino García, copista, restaurador y pintor de escenarios de Corpus. Se afirma que trabajó como dibujante para la Expedición Botánica durante los últimos años de actividades de la Casa Botánica (ca. 1808-1811). Estampó, posiblemente en xilografía, una imagen de la Virgen del Campo, en 1821. En 1823 aprendió litografía con el español Carlos Casar de Molina. En 1833 se desempeñó como actor dramático en la compañía de Juan Granados.

Problemas con el gobierno

Obtuvo un voto para vicepresidente de la República en las elecciones de 1850, en contienda con Juan de Francisco Martín, José de Obaldía y José Joaquín Gori. Fue propietario de una tienda en el centro de la capital, en los bajos de la casa de José Rodrigo Borda (esquina del monasterio de La Esperanza), en la que vendió dulces que llegaron a cobrar gran fama y, entre otros artículos, objetos religiosos, novenas, desayunos, camándulas, panelitas de leche y cuajadas a cuatro el cuartillo. Acusado de repartir "estampas constitucionales" en contra del general José María Melo, fue hecho prisionero por el gobierno dictatorial encabezado por éste, el 3 de octubre de 1854. Este hecho lo convirtió en el primer caricaturista colombiano perseguido y reprendido a causa de sus ideas, y por fuerza de su oficio.


Sólo hasta la última década del siglo XIX, esta vez en la figura de Alfredo Greñas, un dibujante gráfico, conocerá nuevamente el acoso de las fuerzas del gobierno y la reiterada amenaza de la cárcel. Una vez libre, Lozada colaboró con Los matachines ilustrados, periódico de los muchachos y de las muchachas, quincenario conservador que atacó al radicalismo, a los draconianos, a Melo y a José María Obando, y al diario El Tiempo, que estaba en manos de los “gólgotas”. Esta publicación causó terribles polémicas y escándalos debido a las caricaturas que, sin consideración alguna, atacaban a quienes se oponían a las ideas de sus autores, quienes se autodenominaban "matachines". Se sabe, por la variedad de estilos, que fueron varios los colaboradores: Ramón Torres Méndez, José Manuel Groot, los hermanos Martínez, Froylán Gómez y Justo Pastor Lozada, algunas de las figuras más notables cuya participación se ha podido establecer hasta la fecha.


Frente a la puerta falsa de la catedral, sobre la actual calle 11, Lozada fundó en 1869 un taller para dorar al mercurio, dorar al galvanismo, platear, arreglar y limpiar vasos sagrados. Fue profesor de filosofía y matemáticas en varios colegios, músico, actor y básicamente litógrafo, el primero en practicar dicho oficio en Colombia, por lo que se le conoció como el primer litógrafo colombiano y el último santafereño. Murió en tal pobreza que la logia masónica a la que pertenecía, conocida como Cofradía de los Hermanos Terceros, debió costear su entierro. Sobre Lozada, Gabriel Giraldo Jaramillo ha dicho:” Fue un espíritu inquieto, un tanto bohemio, estudioso y bonachón [...J De la actividad artística de Lozada quedan algunos dibujos y litografías. ¿Dónde se cierra corchete?

Su trabajo

En 1855 envió a Alberto Urdaneta un retrato de Sámano, el único conocido del discutido personaje español, con estas simpáticas palabras: "Devuelvo a usted su precioso álbum con un imperfecto bosquejo de don Juan Sámano, uno de los Virreyes durante la reconquista por Morillo (1816 a 1818). Era un viejo cojo y algo jorobado, de carácter muy díscolo y regañón y muy cruel con los pobres patriotas (Dios le haya perdonado y mis palabras no le ofendan). Yo lo conocí muchísimo; y merced a esto y a la buena memoria que a Dios gracias conservo todavía, he podido hacer esas líneas, cuyas ondas le indican a usted el mal estado de mi pulso. Si usted corrige el dibujo quedará completo, pues por lo demás es muy parecido; como lo ha reconocido el general Manuel Antonio López, que también lo conoció mucho. Espero pues que reciba ese mi borrón, no como producto del bello arte que con tanta honra y lucimiento cultiva usted, sino como una débil muestra de la buena voluntad y decisión de su humilde amigo y admirador" [...] Las litografías de Lozada [...] dentro de su línea infantil, tienen gracia y movimiento y cierto aire decorativo que les agrega mucho sabor. Fechados en 1823, es decir, el mismo año de la instalación del establecimiento litográfico en Bogotá, fueron un retrato del general Santander y una imagen de San Cristóbal. La efigie del prócer granadino es la réplica en líneas esenciales de ese nuevo estilo pictórico que bien puede denominarse de los primitivos bogotanos. Es la misma concepción plana, ingenuamente realista, hierática y pintoresca de los retratos de Pedro José Figueroa, fundador de la "escuela", y de quienes siguieron esa línea estética hasta pasada la primera mitad del siglo XIX.


El San Cristóbal tiene más movimiento, como corresponde a un modelo repetido por los pintores coloniales. La inspiración directa viene de Gregorio Vásquez que pintó innumerables veces al patrón de los viajeros, cuya imagen se colocaba en los contraportones de las viejas casas bogotanas. El dibujo no carece de fuerza y está escrupulosamente ejecutado, con sencillez y economía lineal. Lozada fue también autor de una estampa de la Virgen del Campo, otra de las advocaciones marianas famosas en Bogotá [...] de San Joaquín y Santa Ana y de la versión litográfica de un retrato del general Santander por José María Espinosa. El arte y la política se asociaron a veces en las actividades múltiples de Lozada. Fue siempre un buen patriota y un partidario entusiasta del civilismo y las ideas legitimistas [...]. El grabado le sirvió entonces a nuestro primer litógrafo, como ha servido en todas las épocas y países, para combatir la tiranía y luchar en defensa de las normas legales y los principios democráticos.

Martha Segura

  • Esta biografía fue tomada de la Gran Enciclopedia de Colombia del Círculo de Lectores, tomo de biografías.

Bibliografía

  • Giraldo Jaramillo, P. (1960). El grabado en Colombia. Bogotá: ABC.

Enlaces relacionados en Banrep cultural

[1] Consulte el libro José Manuel Groot (1800-1878).

[2] Consulte el artículo "La caricatura política en Colombia", publicado en la Revista Credencial Historia.

[3] Consulte la exposición "La caricatura en Colombia a partir de la Independencia".

[4] Consulte el libro Reminiscencias de Santafé y Bogotá.