La carrera de Oscar Muñoz inició en la década de 1970 con series de dibujos que incorporaban la fotografía sin un interés conceptual en dicho medio, y siguiendo las corrientes del realismo e hiperrealismo que dominaban en el periodo. Su trabajo fue cercano al de otros artistas como Ever Astudillo, Fernell Franco, Edgar Negret, Phanor Satizábal, María de la Paz Jaramillo y Pedro Alcántara Herrán, siendo los dos últimos compañeros muy próximos en el Taller de Gráfica Experimental. Para este momento perduraba también la influencia de una generación anterior de artistas, a la que pertenecieron Jan Bartelsman, Lucy Tejada y María Thereza Negreiros. Varias obras del artista en esta década integran las colecciones de los principales museos de arte en Colombia. En los años ochenta, la escena artística observó la saturación del dibujo y la gráfica, por lo cual se disolvieron eventos y proyectos colectivos relacionados con estos medios. Esto significó para muchos artistas una vuelta a periodos de trabajo introspectivo y relativamente aislado. Para Muñoz, este periodo se caracterizó por una transición desde las imágenes oscuras de los setenta, a unas más luminosas. De esta década es la experimentación con las Cortinas de baño, obra que marca un giro en el uso de las materias y los medios. A partir de la década de 1990, el artista profundizó en la experimentación con nuevas metodologías, partiendo de su experiencia inicial con el dibujo, el grabado y la fotografía, ahora fusionados con el video, la escultura y la instalación. Los desafíos planteados por las obras desarrolladas desde entonces, han implicado apoyos técnicos para el tratamiento sonoro, visual y fotográfico. Continúa usando materiales sobre soportes de agua como en Narciso e integra el vapor como revelador de imágenes, lo que se aprecia en Aliento. Algunas de estas obras ingresan a las colecciones de la Tate Modern Gallery de Londres (TATE), el Modern Museum of Art (MoMA) de Nueva York, el Museo de Arte del Condado de los Ángeles (LACMA) y la colección Daros Latinamerica de Zúrich [1]. En 2005, Muñoz se proyecta como gestor cultural con la creación de Lugar a dudas, espacio de promoción de las artes plásticas en Cali basado en un programa de residencias para jóvenes artistas.

  1. Comunicado de prensa, Fundación Hasselblad, Gotemburgo, 8 de marzo de 2018