Gladys Daza Hernández

Gladys Daza Hernández

Datos generales

Nombre	Gladys Daza Hernández
Fecha de nacimiento	30 de diciembre de 1939
Nacionalidad	Colombiana }}
Ocupación	Escritora
Bachillerato	Colegio María Auxiliadora de Sahagún, Córdoba.
Estudios universitarios	Licenciatura en Ciencias de la Comunicación, Universidad Pontificia Bolivariana, Medellín (Colombia).
Formación profesional	Licenciada en Ciencias de la Comunicación. Especialista en lenguaje audiovisual. Doctora en Ciencias de la Información.
Educación	Doctorado en Ciencias de la Información, Universidad Complutense, Madrid (España), Especialización en lenguaje audiovisual, Universidad de Navarra, Pamplona (España), Pregrado Licenciatura en Ciencias de la Comunicación, Universidad Pontificia Bolivariana, Medellín (Colombia).
País de nacimiento	Colombia }}
Ciudad de nacimiento	Carrillo, Córdoba.

Gladys Daza Hernández escritora y profesora reconocida como pionera en el estudio y enseñanza de las ciencias de la información en el país, además de ser una de las primeras mujeres colombianas en recibir un grado doctoral en la década del 80 en la Universidad Complutense de Madrid (España). Es especialista en lenguaje audiovisual por la Universidad de Navarra (España) y graduada en ciencias de la comunicación de la Universidad Pontificia Bolivariana (Colombia). Fundó la facultad de comunicación de la Universidad Minuto de Dios en Bogotá y el Centro de Comunicación Educativa Audiovisual CEDAL, del cual actualmente es directora.

Biografía

Gladys Daza Hernández nació en el corregimiento de Carrillo (Córdoba) el 30 de diciembre de 1939. Desarrolló sus estudios de bachillerato en el Colegio María Auxiliadora de Sahagún en el mismo departamento, enfocados en la educación para la enseñanza denominada “normalista”, becada por el gobierno departamental. En 1959 y antes de cumplir 20 años ingresó a la congregación de las Hermanas Franciscanas de María Auxiliadora en Cartagena, allí comenzó a ejercer sus labores de docente que luego la llevarían a dictar clases en el Colegio Femenino Palermo de San José de Medellín entre 1963 y 1967.

Durante su estancia con las Hermanas Franciscanas encontró una fascinación por la escritura de obras de teatro, entre ellas una adaptación llamada “Blanca Nieves y los 7 pecados capitales”, que planteaba una reflexión sobre la gracia de Dios. Estas experiencias permitieron que la congregación se animara a patrocinar su ingreso al programa de comunicación en la Universidad Pontificia Bolivariana de Medellín en 1971.

Sobre su paso por la facultad de comunicación, una de las primeras en Colombia en ofrecer asignaturas de redacción periodística, radio, televisión y cine, recuerda que incluso “la sala de redacción tenía máquinas de escribir manuales”, algo muy novedoso para la época. Realizó sus prácticas profesionales en Radio Sutatenza, y participó en la transmisión de un directo en La Unión (Antioquia) del día del campesino, algo que significó un logro muy importante en los inicios de su carrera periodística. En 1975 obtuvo su título en ciencias de la educación.

En 1977 fue nominada por parte de la Universidad Pontificia Bolivariana como candidata al “programa de graduados latinoamericanos” patrocinado por la acción Adveniat, una institución alemana con miras a la asistencia de los católicos latinoamericanos, con la cual adelantó un programa de avanzada (similar a una maestría) en la Universidad de Navarra, obteniendo el título de especialista en lenguaje audiovisual. Al culminar el pregrado también colaboró con el Boletín de la Provincia de las Hermanas Franciscanas, donde notó que con su carrera podría proyectarse más allá de lo que le ofrecía la Comunidad. En compañía de la religiosa austriaca Marghareta Moises, con quien previamente compartió estudios de teología en la congregación, fundaron un centro de comunicación, sin embargo, la ejecución de ese proyecto implicaba la secularización, por la cual optó en 1980.

Durante la década del 80 se trasladó a Bogotá y en compañía de otros cinco colegas comenzó el Centro Educativo de Comunicación Audiovisual, que culminó en la construcción de la asociación CEDAL. Simultáneamente a su trabajo con este centro, Gladys fue profesora de la Universidad Javeriana en Bogotá, dictando cursos de ética de la comunicación y participando en el programa de consultorías, un espacio de proyección de todas las carreras universitarias hacia los barrios periféricos y populares de la ciudad en donde equipos interdisciplinares prestaban algunos servicios a los habitantes de estas zonas. Respecto a la experiencia recuerda que los estudiantes de comunicación orientaban a los de otros programas para que interactuaran con la gente, lo cual les representaba“ un desafío entre lo teórico y lo que encontraban allí, en la práctica”.

Entre 1982 y 1986 llevó a cabo su doctorado en la Universidad Complutense de Madrid, por medio de una beca obtenida a través de un benefactor austriaco; su tesis titulada “Imagen y educación: la imagen electrónica como alternativa de educación popular en América Latina” fue laureada e implicó todo un trabajo de campo que la llevó a visitar Brasil, Argentina, México, Perú y Chile, lugares donde existían diversas iniciativas audiovisuales orientadas hacia la teología de la liberación; como experiencias significativas de su estudio recuerda sus entrevistas en Chile con el licenciado Valerio Fuenzalida y Monseñor José Luis Isern, religioso que se opuso a la dictadura del presidente Augusto Pinochet, a través de programas de radio.

Al culminar el doctorado retomó la dirección del CEDAL y comenzó a trabajar con la Corporación Universitaria Minuto de Dios en Bogotá. En 1993 participó en la construcción de la propuesta al Ministerio de educación para la creación de la facultad de comunicación con énfasis social de dicha universidad, y entre 1994 y 1999 fue decana lo cual le permitió poner en práctica la propuesta curricular que había ayudado a diseñar. En 1984 Se vinculó a la International Asociation Comunication Research (IAMCR), donde fue nombrada como miembro del consejo internacional de esta asociación y representante de América Latina en 1996 durante la convención en Sídney (Australia). Ese mismo año participó como evaluadora de programas de comunicación para la UNESCO en la Universidad Católica de Montevideo en Uruguay.

Gladys también fue profesora invitada en varias instituciones, entre ellas la Universidad de la Paz en Costa Rica entre 1987 y 1988 donde dictó un curso sobre epistemología de la comunicación, la Universidad de Guayaquil en esa misma época, la Universidad de Lima para adelantar un estudio interdisciplinario con el CEDAL, y la Universidad Técnica Federico Santamaría de Chile en 1992 con ocasión del V centenario en donde participó con una ponencia sobre la historia del video. En el año 2000 fue directora de la Hemeroteca Nacional Universitaria (cuando ésta dependía del Instituto Colombiano para la Evaluación de la Educación ICFES) sobre lo cual anota que “fue una experiencia interesante porque nunca había trabajado con una institución oficial, y pude obtener aprendizajes interesantes en ese sentido”. Después de su paso por la hemeroteca, se desempeñó como par académica para la acreditación de programas universitarios en Colombia hasta 2018.

Proyectos educativos y de comunicación

La intención de Gladys Daza con el CEDAL era constituir un equipo interdisciplinario en el que dialogaran diversas ciencias sociales buscando un horizonte de educación pastoral religiosa, enfocándose en la orientación de las personas con escasos recursos. Este centro comenzó a funcionar gracias a la ayuda de las diócesis de Salzburgo, Viena y Alemania, y los aportes de Colciencias, universidades públicas como la Universidad Nacional de Colombia, la Universidad Nacional a Distancia, y privadas como la Universidad Pontifica Bolivariana (con quien han ejecutado algunos talleres), la Universidad del Sinú, la Universidad de Cartagena, la Universidad Tecnológica de Bolívar y la Universidad del Norte en Barranquilla.

La primera sede del CEDAL funcionó en la habitación donde ella vivía, en una casa alquilada ubicada en la calle 19 con 59 en Bogotá; después con la ayuda de la diócesis de Austria compraron una sede para ejecutar sus propios talleres con equipos alquilados. Para Gladys, el CEDAL avanzaba conforme las innovaciones tecnológicas llegaban al país, así entre 1980 y 1985 desarrollaron talleres con le organización FOCINElogrando alianzas en las que la institución conseguía instructores y equipos, mientras que el CEDAL se encargaba de aplicar a becas para invitar a participantes de otros países latinoamericanos como Argentina, México y Perú para desarrollar proyectos experimentales de cine en los que construían desde cero los guiones y se encargaban de la producción, postproducción e incluso de las actuaciones. Durante la ejecución de dichos talleres contaron con la participación de artistas como Carlos Dupplat, Mario Rivero, Lisandro Duque, el director Sergio Cabrera y el camarógrafo Fernando Vélez.

Hacia 1985 comenzaron los talleres de televisión y video, en donde la mayoría de participantes de América Latina estaban vinculados con diócesis, parroquias e instituciones de trabajo con compromiso social. En 1994 Gladys dio inicio a la revista del CEDAL llamada “Interacción”, que comenzó como una publicación impresa y en 2010 se convirtió en digital. El arduo trabajo del Centro fue reconocido el 27 de noviembre de 1998 por medio del “Premio Monseñor Oscar Romero” otorgado por los Hombres Católicos de Austria (KMB) de Salzburgo a las instituciones o personas que hayan adelantado trabajaos de desarrollo social; durante la década del 2000, con el aumento del desplazamiento en Colombia, el CEDAL se preocupó por implementar talleres que fortalecieran la capacidad de los jóvenes para generar ingresos, así adelantaron capacitaciones en informática.