Uva Jaramillo Gaitán

Uva Jaramillo Gaitán

Datos generales

Nombre	Uva Jaramillo Gaitán
Fecha de nacimiento	{Fecha

|nacionalidad = Colombiana }} |ocupación = Escritora |Seudónimo: Laura D’Avignon |país-de-nacimiento = Colombia }} |ciudad-de-nacimiento = Posiblemente en Villahermosa, Tolima. |país-de-fallecimiento = Colombia }} |ciudad-de-fallecimiento = Posiblemente en Medellín. |fecha-de-fallecimiento = hacia 1945 (estos datos son aproximaciones pues se perdió todo rastro de ella) |familia= Rosendo Jaramillo Osorio (padre) y María de los Santos Gaitán Sánchez (madre }}

Biografía

Uva Jaramillo Gaitán nació el 25 de enero de 1893 en Tolima. Si bien se ha creído que el lugar de nacimiento de Uva fue en Líbano, hay datos que descartan esta posibilidad, como la ausencia de registros de su apellido en investigaciones genealógicas realizadas en la ciudad. Es posible que su lugar de nacimiento haya sido, en cambio, Villahermosa, dado que allí se encuentran registros sobre el matrimonio de sus padres y sobre los cinco hijos menores de la familia (Villegas Botero, 2023).

Uva Jaramillo pertenece a la generación de escritoras del siglo XX, también denominadas escritoras centenarias, ubicadas entre la Guerra de los mil días y la celebración del primer centenario de la Independencia. Además, se puede situar en el período literario del neo-romanticismo en Colombia, caracterizado por tonos costumbristas y rurales (López Narváez, 1967). En este marco, Uva Jaramillo manifestó predilección por el “trágico sentimental” (Uribe Muñoz, 1934) y por los géneros del cuento y la novela.

A pesar de las limitadas opciones profesionales que poseían las mujeres en la época, en el siglo XX se da un proceso de modernización en Colombia, con la llegada de una nueva generación de escritoras a la prensa y una mayor posibilidad para las mujeres de aprender a leer y escribir. Ella misma notó este periodo de “desenvolvimiento literario femenino” y manifestó admiración por sus contemporáneas, como Elvira Zea, las hermanas Flórez, María Cárdenas, María Eastman y Blanca Isaza (Ospina, 1927, p. 447).

Uva Jaramillo, en particular, disfrutó su infancia en una casa grande y ostentosa, rodeada por comodidades, y de una instrucción temprana en las letras, incentivada por su madre, que le enseñó a leer y escribir. Además, tomó clases de piano y francés (Uribe Muñoz, 1934) y estudió en el Colegio de la Presentación de las Hermanas de la Caridad en Manizales y en el Colegio del Sagrado Corazón de María en el Líbano, de las señoritas Hartmann, en donde tuvo acercamientos al italiano y el francés (Villegas Botero, 2023). De su infancia, Uva cuenta curiosas anécdotas: robaba botellas de licor de la bodega de su padre y su mayor sueño era el de ser bruja (Meza Posada, 1929, citado por Villegas Botero, 2023).

Debido a una crisis pecuniaria en 1910, Uva tuvo que dejar sus comodidades para pasar el resto de su adolescencia en la finca de Santa Inés en las laderas del Nevado del Ruiz. Además, un año después, a los 18 años, quedó huérfana de madre y desde ese momento tuvo que hacerse cargo de su hogar. A pesar de todo, en las laderas del Ruiz pudo cultivar una estrecha relación con el paisaje natural del páramo, que menciona en su autobiografía (1934) y en sus cartas al Padre Fabo. Incluso, incluye el paisaje del Ruiz en algunos capítulos de su novela Corazón Herido (1917) y en su crónica Zagala (1924).

A pesar de ser originaria del Tolima, Uva en distintas ocasiones expresó ser de formación y corazón caldense, como lo hace en una nota biográfica al Padre Fabo (1926): “Es verdad que nací bajo el cielo del Tolima, pero a Caldas me vinculan, y muy estrechamente, varios lazos” (p. 518). En efecto, finalmente antes de 1914 Uva se muda para Manizales con sus hermanos y su padre, este último originario de la ciudad.

Aunque Uva Jaramillo escribió desde pequeña bajo la guía de su madre, apenas allí en Manizales, a sus 27 años, empezaría su carrera literaria, al obtener, con el cuento Memo el premio Jazmín de Plata, segundo lugar en el concurso literario promovido por la Sociedad de Mejoras Públicas en 1920. A partir de allí, Uva se dedicó principalmente a la escritura de novelas cortas y cuentos en periódicos y revistas, como La Voz de Caldas y La Novela Semanal, aunque también se encuentran títulos suyos en El Tiempo. Algunas de sus principales novelas son El Campanero, Infierno en el alma y Corazón herido, si bien de esta última solo se conocen dos capítulos. Aunque nunca se consideró poetisa, también escribió algunos poemas, la mayoría de ellos inéditos.

La Patria le dedicó un Sábado Literario a Uva Jaramillo en 1922. Además, Uva llegó a ser jefe de redacción de La Voz de Caldas desde mediados de 1927 hasta agosto de 1929. En este puesto, se hizo cargo de su número 1.000, edición especial. Durante los incendios de Manizales de 1925, Uva Jaramillo viajó a Ibagué y luego, de nuevo en Manizales, se alojó en el Hotel Reina hasta su partida en 1929 (Villegas Botero, 2023).

En su momento, Uva Jaramillo también se conoció como conferencista. Fabo (1926) menciona dos conferencias en particular. La primera versó sobre “tópicos femeninos” (p. 519) y Uva la dio el 9 de septiembre de 1920, encargada por la Sociedad de Mejoras Públicas en el Club Antioquia. La segunda la dio el sobre el desarrollo de la imprenta, el 3 de abril de 1921 en los salones de la Gobernación, encargada por la Remington School, en donde Uva había estudiado contabilidad y mecanografía.

En cuanto a sus influencias literarias, Uva Jaramillo menciona a Gabriela Mistral, Victor Hugo, Kempis, Cervantes, Wilde, Milton, Nietzsche, entre otros (Uribe Muñoz, 1934), y a Ricardo Nieto como su poeta favorito (Fabo, 1926).

Créditos

*Biografía escrita por Ángela Gaviria Piedrahita para el proyecto Mujeres escritoras centenarias del Gran Caldas en el marco del centenario del Banco de la República.

Viaje y clausura

Uva Jaramillo, sin previo aviso, partió el 15 de agosto de 1929 del puerto de Buenaventura a bordo del Santacruz, según cuenta en Diario fugaz (Jaramillo Gaitán, 1929), una obra publicada en ocho entregas en La Voz de Caldas, en donde narra su viaje. La escritora que de niña quiso ser bruja, a sus 36 años estaría renunciando a su país, su oficio e incluso su firma para recluirse en un convento de España bajo el nuevo nombre religioso de Sor María de Betania. La vocación religiosa de Uva, según cuenta en Diario Fugaz, nació de una noche de 1917 en que la que su madre ya difunta, en sueños, le decía: “Hija, ten cuidado, porque no te salvarás sino en vocación religiosa” (Jaramillo Gaitán, 1929, p. 6). Así, Uva llegó a Barcelona el primero de noviembre para entrar al convento de la Comunidad del Buen Pastor. En la clausura, Uva Jaramillo no dejó de escribir. De hecho, la literatura que produjo desde ese momento toma un tono más marcadamente místico y gira en torno a la vida religiosa, como se refleja en dos capítulos de Memorias del convento que publica en la edición 3.000 de La Voz de Caldas, en el 10 de abril de 1937 (Villegas Botero, 2023). En especial, esto se puede ver en en el último texto de Uva Jaramillo (1941) del que se encuentra registro, publicado en Letras y Encajes, en donde reflexiona sobre su vocación:

Había llegado mi vida a su máximo sentir: era el momento álgido en que me lanzaba con las alas abiertas hacia un azul soñado durante tantos años! El claustro! [sic] Me pareció tocar el infinito y tuve miedo... Como las plantitas de brazos sarmentosos, me así a un árbol gigante. El claustro tiene modalidades de abismo: allí todo desaparece! Como el abismo, atrae! Como el abismo, asombra! Ansiaba mi pobre alma hundirse en grandezas inefables; me sentía irresistiblemente atraída, mas, tenía pavor al franquear el dintel. (...)

Incinerado el pasado con mis libros de páginas amadas: depurados la cabeza y el corazón por ese mismo fuego abrasador, la llama penetró más aún para hacer la depuración interior con el nombre del holocausto. y al lado de María Luz me acerqué a Dios para entregarlo lo único que me había reservado: el nombre. Él, en cambio, me llamó Betania, su casa íntima (p. 5510).

   A partir de allí, se vuelve más difícil rastrear la biografía de Uva Jaramillo, y ni siquiera se conocen con certeza publicaciones posteriores. Se encuentra un registro de viaje que indica que se embarcó a Nueva York en septiembre de 1941 (Villegas Botero, 2023). Pachón Orozco (s. f.) cuenta que: “Más tarde estuvo trabajando en la normal de Maracaibo y en 1945 regresó a su patria ingresando al convento de las monjas del Buen Pastor. Finalmente vivió en el convento de Medellín donde escribió dramas y autos religiosos” (citado por Villegas Botero, 2023, p. 152). Esto es lo último que se sabe de ella. A partir de esta incógnita, Carlos Eduardo Marín Ocampo, en Mi papá viejo, se permite ficcionalizar sobre la vida tardía y muerte de Uva Jaramillo, de la cual tampoco se tienen registros. 

Publicaciones

En la obra de Uva Jaramillo Gaitán se encuentra un total de 49 títulos únicos (Villegas Botero, 2023). A continuación, se enumeran algunos de los más importantes.

Según lo cuenta Uva en su autobiografía (Uribe Muñoz, 1934), en el diario Renacimiento publicó:

• Incógnita
• Rayos de luna
• Sin cadenas
• El primer pesar

En la Revista Sábado (Medellín)

• En la fragua. (Nº75, diciembre 9 de 1922, pp. 906-908).

En La novela semanal:

• Infierno en el alma. La novela semanal, Nº72, Bogotá, junio 5 de 1924 (299-309). Nº73 y 12 de junio de 1924 (310-323).
• El Campanero. La novela semanal, Nº107, octubre 5 de 1924 (139-152)
• La Mendiga. El cuento semanal, especial para La Novela Semanal (61-62).

En Letras y encajes:

• Está dormida. Nº7, febrero de 1927, p. 101.
• La primera misa de América. Nº123, octubre de 1936, p. 2200.
• Costumbres belgas. Letras y Encajes Nº133, agosto de 1937.
• Mirada retrospectiva. Letras y Encajes Nº181, agosto de 1941.

La Patria le dedicó a Uva Jaramillo un Sábado literario el 14 de enero de 1922, en donde fueron publicados:

• Silueta Romántica, poema.
• La Tarde, cuento del libro en preparación Hojas Dispersas.
• Sor María, capítulo de Corazón Herido, novela que se perdió en uno de los incendios de Manizales.

También La Voz de Caldas le dedicó a UVa Jaramillo un Sábado Literario, en donde se encuentra su crónica Zagala. Además de ellas, Uva publicó en este diario cuentos, crónicas, una carta y un poema (Villegas Botero, 2023, p. 140). Entre ellos, se puede mencionar La asesina de Napoleón, publicado el 16 de enero de 1926, y el cuento Querella infantil, publicado el 17 de agosto de 1927.

Por último, entre sus obras inéditas se encuentran:

• Lágrimas silenciosas, argumento de guion pensado para la Empresa Cinematográfica Manizaleña.
• Hojas dispersas, colección de cuentos.
• Pétalos, colección de poesía. Dos de los poemas incluidos en esta colección, Mi Perro y Psiquis, se encuentran en la autobiografía de Uva publicada por Uribe Muñoz (1934).
• Maldición, novela.

Además, en Antología de escritoras antioqueñas, 1919-1951, Pérez Sastre (2000) incluyó los cuentos Memo, En la fragua e Incógnita.

Valoraciones sobre su obra

   El Padre Fabo (1926), en Historia de la ciudad de Manizales, realiza varias consideraciones sobre la obra de Uva, en donde considera su estilo “de corte francés, nervioso, con cláusulas sueltas y breves” (p. 519). En cuanto a su trabajo literario, escribe:

Son los trabajos literarios de Uva Jaramillo Gaitán muy merecedores de estudio porque representan un esfuerzo honrado y revelan el talento de una mujer que posee temperamento literario, pero que emplea método inadecuado para sus valores artísticos, presentando modalidades diversas, todas muy por encima de lo común (p. 519)

Además, Joaquín Ospina (1927), en Diccionario biográfico, menciona que han aparecido conceptos sobre Uva Jaramillo Gaitán en diversas revistas, entre las que se incluye Revista Bolívar, El Orden, La Lucha, El Diario, y Antioquia Liberal.

Referencias

• Fabo, P. (1926). Las tres gracias. En: Historia de la ciudad de Manizales. Tipografía Blanco y Negro.

Jaramillo Gaitán, U. (1929). Diario fugaz. La voz de Caldas, 7 de diciembre de 1929.

Jaramillo Gaitán, U. (1941). Mirada retrospectiva. Letras y encajes. 8 de agosto de 1941, pp. 5509-5510.

López Narváez, C. (1967). Síntesis de la novelística neogranadina y colombiana. Boletín Cultural Y Bibliográfico, 10(12), 45–57. Recuperado de: https://publicaciones.banrepcultural.org/index.php/boletin_cultural/article/view/4086

Marín. C. E. (2001). Uva Jaramillo Gaitán. En: Mi papá viejo y otros relatos manizaleños, 23-58. Manigraf.

Ospina. J. (1927). Jaramillo Gaitán Uva. En: Diccionario biográfico, 447-448.

Pérez Sastre, P. (2000). Antología de escritoras antioqueñas 1919-1950. Secretaría de Educación y Cultura de Antioquia.

Uribe Muñoz. (1934). Uva Jaramillo Gaitán. En: Mujeres de América, 74-77.

Villegas Botero, A. (2023). 13 escritoras del Gran Caldas. Huellas de autoras de Caldas, Quindío y Risaralda en la prensa de Manizales de los años 20 y 30 del siglo XX. Universidad Tecnológica de Pereira.

Cronología:

• Nacimiento: 25 de enero de 1893 en Tolima
• 1910 – Crisis pecuniaria – Mudanza de Uva Jaramillo a la finca de Santa Inés en las laderas del nevado del Ruiz.
• 1911 – Muerte de la madre de Uva Jaramillo
• 1914 – Uva Jaramillo se muda a Manizales con sus hermanos y su padre.
• 1920 – Uva Jaramillo gana segundo lugar en el concurso literario promovido por la Sociedad de Mejoras Públicas con el cuento “Memo”
• 1922 - La Patria le dedicó un Sábado Literario a Uva Jaramillo
• 1929 – Uva partió el 15 de agosto del puerto de Buenaventura a bordo del Santacruz.
• 1941 – Uva se embarca a Nueva York.

Referencias:

Materiales encontrados en las colecciones del Banco:

1. “La mendiga” https://descubridor.banrepcultural.org/permalink/57BDLRDC_INST/qk5q4l/alma991015774279707486

1. “Infierno en el alma”

https://descubridor.banrepcultural.org/permalink/57BDLRDC_INST/qk5q4l/alma991015985779707486

1. “En La fragua”

https://descubridor.banrepcultural.org/permalink/57BDLRDC_INST/qk5q4l/alma991007261939707486