José Jaime González Pico

José Jaime González Pico

Archivo:José "Chepe" Gonzlález.jpg

Chepe González en el Giro de Italia 1997.

Datos generales

Nombre	José Jaime González Pico
Fecha de nacimiento	28 de julio de 1968
Ocupación	Ciclista
País de nacimiento	Colombia }}
Ciudad de nacimiento	Sogamoso, Boyacá

José Jaime González Pico, conocido como “Chepe” González, es un ciclista colombiano que obtuvo una victoria de etapa en el Tour de Francia de 1996, y dos en el Giro de Italia en 1997 y 1999. En ambas ediciones se coronó líder de la clasificación de la montaña.

Biografía

Sus más grandes logros como corredor en Europa los obtuvo cuando se acercaba a los 30 años de edad. Fue el pedalista más destacado a finales de la última década del siglo XIX en Colombia, reconocido por ser uno de los protagonistas recurrentes, tanto en las fugas como en los ascensos. González obtuvo la primera victoria de etapa en su carrera deportiva profesional en la Vuelta a Colombia de 1990, año en el que también corrió en la Vuelta al Táchira en Venezuela.

El Clásico y la Vuelta

En 1991, cuando corría para el equipo Café de Colombia, González volvió a ganar una etapa en la llegada a Santa Rosa de Osos, convirtiéndose en el líder provisional del Clásico RCN (González, 1991). Ganó otra etapa más y el campeonato de la montaña, pero no bastó para quedarse con la clasificación general (“José Jaime González Pico”, s. f.). En ese mismo año, “Chepe” González terminó tercero en la Vuelta al Táchira y corrió su primera carrera en Europa; terminó segundo en la clasificación de montaña y octavo en la general del Giro de las Regiones, una carrera italiana reservada para corredores jóvenes.

En 1992, González pasó al equipo Postobón. Con esta escuadra ganó su primera etapa en la Vuelta a Colombia y repitió el campeonato de montaña en el Clásico RCN. En ese año, y gracias a sus logros en los tres años siguientes, se consolidó como uno de los ciclistas de referencia en el país. Fue el líder de la montaña de la Vuelta a Colombia en 1992 y campeón en las ediciones de 1994 y 1995. Su primer triunfo, en la que fue en ese entonces la competencia ciclística más importante del país, incluyó el liderato de la montaña y de la clasificación por puntos. En 1996, González corrió la Vuelta a Colombia y el Clásico RCN, en donde ganó una etapa. Gracias a su buen desempeño deportivo fue contratado por el equipo Kelme en 1995, lo que le dio la oportunidad de regresar a Europa a los 27 años.

El Tour y el Giro

En 1996, González participó por primera vez en el Tour de Francia, en donde, luego de una fuga a 60 kilómetros de la meta, terminó de primero en la llegada en plano de la etapa 11 (“De algo sirve ser bajito: González”, 1996). La carrera fue útil para demostrar sus habilidades como esprínter y pasista, nombre otorgado a los ciclistas que desarrollan altas velocidades en distancias prolongadas de terreno plano.

La victoria de González, si bien fue importante, fue opacada por la situación política de Colombia. El mismo día de su primera victoria de etapa en el Tour, el gobierno de los Estados Unidos canceló la visa del presidente Ernesto Samper, un mes después de ser absuelto por el Congreso en una investigación sobre la presunta entrada de dineros del narcotráfico a su campaña (Lozano, 1996 y Silva, 2017), lo que generó una crisis de gobernabilidad durante su periodo presidencial (González, 2015). En Colombia, usualmente, los triunfos deportivos opacan a las malas noticias; en este caso, sucedió lo opuesto.

Hubo dos razones adicionales para que el logro de González pasara casi inadvertido. El corredor no logró otra figuración destacada en la carrera y arribó a París en el puesto 98 de la general. Además, el interés de los medios en los pedalistas colombianos en Europa bajó, lo que fue reseñado por sus colegas (“Chepe viene de lejos, de otro planeta”, 1996).

En 1997, en el Giro de Italia, “Chepe” González participó de una fuga en la etapa veinte, en donde estuvo su antiguo compañero de equipo, Hernán Buenahora. González se llevó la prueba a la llegada del Paso del Tonale; su segunda victoria en una de las tres grandes, luego de varios intentos en la misma carrera. Por cuenta de este esfuerzo, se quedó con el premio de montaña (“Mi amor, lo vas a intentar otra vez”, 1996). Dos años después, ganó de nuevo en la llegada a Monte Sirino, y repitió el liderato de la montaña.

La tercera que no fue

Para 1999, todavía corriendo para Kelme, González volvió a ganar en la etapa a Monte Sirino (“Salud, Chepe”, 1999) y peleó la clasificación de la montaña con Marco Pantani, el mejor escalador de la época. En ese año se dio un escándalo por la sospecha de uso de sustancias prohibidas por parte de Pantani, lo que le dio, temporalmente, un segundo triunfo en la montaña al ciclista de Sogamoso. El italiano fue expulsado del Giro en la penúltima etapa, pues un conteo alto de hematocritos en su sangre sugería un dopaje por eritropoyetina o EPO, hormona que producen los riñones de manera natural cuando se detecta un número bajo de glóbulos rojos y que algunos deportistas se inyectaban para mejorar la circulación de oxígeno.

En 2014, un fiscal italiano ordenó una nueva investigación de lo ocurrido, ya que se sospechó una manipulación de los resultados de la prueba antidopaje por parte de la mafia. Las indagaciones confirmaron las sospechas, pero el delito prescribió (“La mafia ‘alteró’ el hematocrito de Pantani”, 2016). El “Pirata” Pantani fue encontrado sin vida, diez años antes del inicio del proceso, en un hotel de Rimini, Italia (“Marco Pantani: 15 años de una muerte que golpeó al ciclismo mundial”, 2019).

González continuó su carrera deportiva con el equipo Selle Italia en el año 2000, como coequipero de Buenahora. En esa oportunidad participaron ocho ciclistas colombianos; la principal figura era González, por sus triunfos anteriores (“La esperanza no se pierde”, 2000). Fue también el segundo mejor escalador en ese año.

En marzo de 2001 salió en medio de acusaciones de dopaje, cuando se encontraron sustancias prohibidas en el auto del médico del equipo. “Chepe” González fue contratado por el equipo Mobilvetta dos meses después (Machado, 2001) y corrió su sexto Giro de Italia.

Tras su retiro, González se dedicó a los caballos, su otra pasión. Su mamá, que rociaba su bicicleta con agua bendita en sus primeras competencias, dependía económicamente de sus triunfos, al igual que sus hermanas (Rendell, 2004). Como otros corredores colombianos de la época, y a pesar del talento que mostró en etapas con distintas condiciones de carrera, el principal rol de “Chepe” se redujo al de gregario. Esto minó la posibilidad de conseguir más triunfos, pero no por ello dejó de ser el responsable de revivir la ilusión del ciclismo colombiano.

Cargos en los que se desempeñó

• Ciclista del equipo Cafam (1989)
• Ciclista del equipo Café de Colombia (1990-1991)
• Ciclista del equipo Postobón (1992-1994)
• Ciclista del equipo Kelme (1995-1999)
• Ciclista del equipo Selle Italia (2001)
• Ciclista del equipo Mobilvetta-Formaggi Trentini (2001)