Migraciones ícticas de la Amazonía
Al igual que otras especies del reino animal, el complejo universo de los peces incluye comportamientos migratorios entre ecosistemas y nichos biológicos situados en distintos cuerpos de agua.
Grandes ríos del mundo como el Nilo, el Mekong, el Amazonas y Magdalena contienen en sus ejes fluviales migraciones ícticas motivadas por factores tróficos (dieta de cada especie) y comportamientos reproductivos como el desove que constituyen temporadas y relaciones espaciales e hidrológicas particulares en cada tramo del cauce principal o entre distintas cuencas hidrográficas.
Según la clasificación señalada por Morais y Daverat (2016)[1], la fauna de los peces incluye potádromos (habitantes del interior de la cuenca), junto a diadromos y anfídromos (adaptados a las aguas salobres del mar y las dulces de los ríos) que habitan zonas litorales cercanas a las desembocaduras en los océanos.
Entre las caracterizaciones de migraciones de peces en ejes fluviales y demás cuerpos acuátiles que conforman el trapecio amazónico, se destaca la hipótesis de Barthem & Goulding (1997):
- que las especies de grandes bagres hacen migraciones de tipo trófico y reproductivo de más de 3.000 km entre el estuario del Amazonas y las cabeceras del Amazonas en Colombia y Perú, demuestra el mayor movimiento migratorio conocido para cualquier pez en cualquier sistema fluvial del mundo (Barthem et al., 1991; Rufino et al., 2000; Barthem & Fabre, 2004)[2].
En FAO (1992)[3], se indica que la afluencia y distribución de las especies en el curso de los ríos se produce a partir del influjo de diversos factores biogeográficos y geomorfológicos como el relieve y el régimen pluvial en cauces y caudales; procesos de la superficie terrestre ligados a la relación particular de cada especie íctica con elementos como la cobertura vegetal circundante. También se afirma que las migraciones de peces corresponden a una serie de procesos adaptativos como: a) resistencia a la fuerza de las corrientes; b) alimentación y respiración en ambientes acuáticos carentes de luz solar y poca oxigenación; c) cambios de temperatura y desecación, entre otros factores relacionados con las particularidades fisonómicas, fisiológicas y reproductivas de cada especie.
Por su singularidad cabe resaltar los peces de hábitos sedentes, entre ellos ciertos tipos de bagres que habitan fondos de ríos (sistemas lénticos) y lagunas (sistemas lóticos), especies que han adaptado su aparato respiratorio para sobrevivir ciertos periodos de tiempo fuera del agua. Es menester incluir otra forma de adaptación en estas especies que consiste en la producción o amplificación de ondas sonoras para la audición mediante el uso de ciertos órganos de sus cuerpos[4].
- ↑ Morais, P., Daverat, F. (2016). An introduction to fish migration. Florida, EE.UU.: CRC Press
- ↑ Zapata, L. & Usma, J. (2013). Guía de las Especies Migratorias de la Biodiversidad en Colombia: Peces. Volumen 2. Bogotá D.C. Colombia. Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible y WWF-Colombia. p. 33
- ↑ FAO. (1992). Pesca fluvial. Organización De Las Naciones Unidas Para La Agricultura Y La Alimentación, Roma
- ↑ Cala-Cala, P. (2019). Medio ambiente y diversidad de los peces de agua dulce de Colombia. Bogotá, Colombia: Academia Colombiana de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales