María Helena Uribe de Estrada

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María Helena Uribe de Estrada
Datos generales
Nombre María Helena Uribe de Estrada
Fecha de nacimiento 17 de julio de 1928
Nacionalidad Colombiana Bandera de Colombia }}
Ocupación Escritora
Primaria Colegio del Sagrado Corazón, Medellín
Bachillerato Colegio del Sagrado Corazón, Medellín
Formación profesional Autodidacta
País de nacimiento Colombia, Bandera de Colombia }}
Ciudad de nacimiento Medellín
Fecha de fallecimiento 16 de noviembre de 2015
Familia Gustavo Uribe Escobar (padre); Rosa Echavarría (madre); Beatriz, Alberto José, María Isabel, María Luisa y Natalia (hijos)
Cónyuge Leonel Estrada


Maria Helena Uribe de Estrada fue una escritora colombiana nacida en Medellín en 1928. Es considerada una de las principales voces de la literatura femenina colombiana de la segunda mitad del siglo XX. Junto con su esposo, Leonel Estrada, promovió espacios culturales, literarios y artísticos en la ciudad de Medellín en la década de 1960. Tuvo una fuerte amistad y admiración por el filósofo Fernando González, sobre quien escribió varios ensayos analíticos sobre su obra. Murió el 16 de noviembre de 2015.

Biografía

Primeros años e intereses

María Helena Uribe de Estrada fue una escritora colombiana nacida el 17 de julio de 1928 en la ciudad de Medellín (Antioquia). Su madre fue la señora Rosa Echavarría Misas de Uribe, ama de casa; y su padre fue Gustavo Uribe Escobar (1890), médico de profesión. Él fue reconocido en la ciudad de Medellín porque fue el fundador y director del instituto profiláctico de Medellín (1917), vicepresidente de la academia de medicina de esa misma ciudad (1931), Rector de la Universidad de Antioquia (1932), y fundador y presidente del Comité Departamental de la Cruz Roja (1927)[1]. Sus abuelos maternos fueron la señora Ana Josefa Misas Eusse y el señor Alejandro Echavarría Isaza (1859 – 1928), industrial y filántropo antioqueño, quien llevó la luz eléctrica a Medellín y fundó el Hospital San Vicente de Paúl, el Banco Alemán Antioqueño, la Compañía Colombo Alemana de Aviación (SCADTA) y la empresa Coltejer. Sus abuelos paternos fueron el señor Juan Crisóstomo Uribe Gómez y doña Isabel Escobar Mejía. Los hermanos de María Helena fueron Martín, Marta Cecilia, Margoth y Rodrigo Uribe Estrada[2].

Estudió la primaria y la secundaria en el colegio del Sagrado Corazón, en Medellín. Mientras su padre fue rector de la Universidad de Antioquia, al mismo tiempo estaba dirigiendo el instituto profiláctico de la ciudad de Medellín; de modo que fue señalado por Partido Liberal de devengar dos salarios y decidió vender una valiosa colección de estampillas para trasladarse con toda su familia a Europa. Se instalaron en Bruselas (Bélgica) y ella estudió allí de 1937 a 1939. Sobre esta experiencia, comentaba:

Era un lugar muy sano, muy lindo y familiar. (…) Mi mamá me compraba un libro semanal, y yo me leía un libro semanal, y si ya lo había terminado lo volvía a empezar mientras mi mamá me compraba el libro que seguía[3].

Regresaron a Colombia tras el estallido de la Segunda Guerra Mundial (1939 y 1945) y María Helena terminó sus estudios en el Sagrado Corazón. Fue una ávida lectora desde muy joven y a los 15 años de edad, aproximadamente, inició el hábito de escribir un diario. Le gustaban las máquinas de escribir y solía utilizar una que le había pertenecido a su padre. Del diario resultaron muchas páginas que se volvieron volúmenes con nombres como Cuando nació el amor o Derrumbes de un sueño[4], los cuales no fueron publicados.

Entre 1946 y 1947 se fue a estudiar inglés y algunas artes al Marymount College de Tarrytown, cerca de Nueva York[5]. Pidió que le regalasen una máquina de escribir por su graduación. Al principio la usaba para escribir cualquier cosa, luego empezó a escribir cartas a sus familiares y amigos. Llegó a escribir que en el colegio Marymount las monjas eran muy indiferentes y que, a pesar que el colegio era muy bonito y grande, no tenía mucha compañía:

Allá [Marymount College] no había con quien comunicarse, ni siquiera algo espiritual, nada, ni con el mismo capellán, nada. Entonces fue un año de soledad total. No había comunicación ni con las amigas. Tal vez por eso le escribía tantas cartas a mi familia, amigas y conocidos en Colombia[6].

Al regresar a Medellín, se educó de manera autodidacta en el estudio de idiomas, artes plásticas, música y deportes. Su curiosidad la llevó a conocer varios intereses y a tener una prolífica obra. Esto estuvo directamente relacionado con sus intereses literarios como, por ejemplo, era lectora de escritores como los franceses Émile Zola (1840-1902), Stendhal (1783-1842), Gustave Flaubert (1821-1880), Albert Camus (1913-1960) y la exponente del feminismo Simone de Beauvoir (1908-1986). También disfrutaba los textos de Mark Twain (1835-1910); del venezolano Rómulo Gallegos (1884-1969); la marcó significativamente La vorágine (1924) de José Eustasio Rivera (1888-1928) y Tiempo de sequía (1957) de Manuel Mejía Vallejo (1923-1998). Con este último escritor mantuvo una estrecha comunicación y fue un lector exigente y motivador de su obra[7].

Compartió amistad con el poeta colombiano y fundador del movimiento nadaísta Gonzalo Arango (1931-1976); así como con el escritor Eduardo Carranza (1913-1985). Sin embargo, la influencia más grande que recibió fue la del escritor y filósofo Colombiano Fernando González Ochoa (1895-1964)[8]. La evidencia de ello es la cantidad de escritos que le dedicó al estudio de la obra de González.

Vida y obra

En 1950 la escritora se casó con el odontólogo, escritor, curador, gestor cultural y crítico de arte colombiano Leonel Estrada (1921-2012). Tuvieron cinco hijos: Beatriz, Alberto José, María Isabel, María Luisa y Natalia. Ambos se dedicaron al arte – a crearlo y a promoverlo – de modo que su hogar se convirtió en un punto de encuentro artistas y escritores que los buscaban para compartir e intercambiar opiniones. La casa era una construcción diseñada por el arquitecto Eduardo Caputi, ubicada en El Poblado (Medellín, Antioquia)[9]. Tenía un sótano el cual Estrada propuso llamar “La Taberna del Ahorcado”; como un guiño a uno de los detalles que aparece en el clásico del escritor Robert Louis Stevenson (1850-1894) La Isla del Tesoro (1883).

Allí se realizaron conciertos, tertulias, conversaciones, exposiciones y visitas como las del filósofo Fernando González (1895-1964), los artistas Fernando Botero (1932- ), Edgar Negret (1920-2012), Enrique Grau (1920-2004), Luis Caballero (1943-1995), Manuel Hernández (1928-2014), Omar Rayo (1928-2010), Lucy Tejada (1920-2011), Alejandro Obregón (1920-1992), Dora Ramírez (1923-2016), Justo Arosemena (1929-2000), Carlos Granada (1933-2015), la crítica de arte Marta Traba (1930-1983); también los escritores y poetas Manuel Mejía Vallejo (1923-1998), Gonzalo Arango (1931-1976), Olga Elena Mattei (1933-), Rocío Vélez de Piedrahita (1926-2019), entre otros personajes tanto nacionales como internacionales[10] [11]. Fueron una pareja que se complementó en estos intereses culturales:

[...] para ellos vivir era crear. Lo hicieron cada uno por su cuenta, y de una manera potenciada cuando estaban juntos. (…) La pareja Estrada Uribe como pocas la encarnaron con los límites y las posibilidades de su momento histórico y de su generación[12].

En este ambiente artístico en la década de 1960, María Helena también fue parte fundamental del grupo literario La Tertulia, convocada por Gonzalo Restrepo Jaramillo (1895-1966) jurista, empresario, político y escritor; desde 1961 en la ciudad de Medellín. En este grupo se reunían aspirantes a escritores y otros con trayectoria en el paraninfo de la Universidad de Antioquia, para compartir sus trabajos[13]. Participaron también figuras como Jaime Sanín Echeverri (1922-2008), Olga Elena Mattei (1933), Jorge Montoya Toro (1921-1989), entre otros[14]. Gracias a las reuniones de La Tertulia, María Helena pudo publicar con mayor confianza sus primeras producciones literarias[15]. Entre 1962 y 1963 todos los miembros del taller publicaron obras que habían sido comentadas dentro del grupo.

Siempre escribió y escribió en muchas formas: diarios, poesía, cuento, ensayos y novela. En 1959 María Helena publicó Polvo y ceniza, su primer cuento y con el que participó en el Concurso Nacional de Cuento convocado por el periódico El Tiempo en la ciudad de Bogotá, donde quedó finalista entre 515 participantes[16]. Con ese mismo nombre, Polvo y ceniza, en 1963 la escritora tituló su primera obra completa: catorce cuentos y seis reflexiones[17].

En el género ensayístico se afianzó en 1969, con Los ensayos de Fernando González y El padre Elías y otro posterior, en 1999, titulado Fernando González: El viajero que iba viendo más y más. Sobre González, María Helena escribió numerosos ensayos y él también reconoció en ella su grandeza literaria. En siguiente fragmento, que hace parte de una carta que le escribió González a Uribe de Estrada sobre su libro Polvo y Ceniza, él le dijo:

[...] trata de abrir grietas en la persona (persona es máscara) para conocerse desnudo o nada purísima o Dios. Eso que no tiene nombre, ni palabras porque su palabra es sustancial, nos hizo de la nada: soplos de la Nada Divina. Pero estamos vestidos; quisimos tener un mundo para ser dioses de él: nos vestimos, avergonzados de nuestra nada o desnudez cuando ya no vimos a Dios. Todo este libro es invitación a conocerse a sí mismo. Es un libro de sabiduría. Usted es vasca; usted es minera; rompe, cava. Desgarra en la apariencia (la persona) para hallar al que está escondido y es inefable. Por eso usted es tenaz en agotar las palabras, en bombardear las imágenes[18]

González murió en 1964 y tanto María Helena como su esposo lo visitaron asiduamente en los últimos años de su vida. Le rindieron un homenaje con unas palabras cargadas de admiración: “Ir a su casa era entrar en refugio donde se perdía la sensación de tiempo, de espacio, de gravitación. Era vivir el pensamiento puro, el amor puro, la esperanza pura. Salíamos reconfortados, seres nuevos, llenos de espíritu y de naturaleza[19]

En 1986 publicó su primera y única novela Reptil en el tiempo: ensayo de una novela del alma. En esta obra se evidencian las influencias literarias de sus autores favoritos, tales como Rómulo Gallegos y Fernando González, pues evoca posturas nietzscheanas sobre Dios, también habla sobre la culpa, la soledad, la maternidad, la locura y la cárcel. Se la dedicó a su esposo y a sus hijos y con 58 años de edad, confesó que tuvo que repartir su tiempo y su espíritu entre ser madre, ama de casa y escribir. Probablemente quería dedicarse tiempo completo a la literatura[20], por eso la feminidad y la culpabilidad estuvieron presentes en los escritos de María Helena. El escritor colombiano Augusto Escobar Mesa (1949), analizó la fuerza de las primeras obras publicadas por esta escritora y reflexiona lo siguiente:

¿Pero qué es lo que encontramos en la literatura de Uribe que la crítica es unánime para reconocer en ella una de las voces más singulares de la literatura femenina colombiana de la segunda mitad del siglo XX? Su obra de ficción es poca pero densa, intimista, reflexiva, profundamente autocrítica. Ella revela el cuestionamiento existencial de mujeres problematizadas, agonistas, profundamente culpabilizadas que buscan redimirse con lo único posible, la escritura. Ante un estado de abismo permanente, de desfondamiento del ser, la palabra es el único asidero, el resorte último que libera de la muerte (atomización de la existencia) y restituye la unidad perdida. Es la afirmación de un yo en su identidad peculiar femenina, crítica. Polvo y ceniza al igual que la novela Reptil en el tiempo son dos libros de las edades de la vida y del tiempo en los que la escritura y la muerte adquieren exactas y casi tangibles dimensiones; son también los libros de las grietas surgidas en el tiempo, en la noche, en la aridez, en la maternidad, en sí misma, en el amor y las que dejan los libros. Grietas por donde se escapa la angustia sin remisión de vidas en busca de respuestas a preguntas que cada vez sugieren otras y, así, sin límite en el horizonte[21].

Tardó el publicar porque no quería que ningún libro que ella escribiese molestara a sus hijas[22]. Pero la vigencia de su trabajo perduró durante varias décadas más, mientras su familia siguió creciendo y ella estuvo presente para ellos; también lo hizo el reconocimiento de su obra y de su papel en la promoción cultural en Medellín y del de ella misma como escritora en un momento del siglo XX en el que estaba renovándose la escritura femenina en el país.

Su esposo, Leonel Estrada, murió en el 2012 con 91 años de edad y ella murió el 16 de noviembre de 2015, a los 87 años, por una enfermedad pulmonar. “No podemos hablar de María Helena Uribe sin Leonel Estrada, y no podemos hablar de Leonel Estrada sin hablar de María Helena. En gustos y aficiones eran afines, sus vidas se llenaban de literatura y de arte” estas fueron las palabras de la hija mayor del matrimonio, Beatriz[23]. En agosto de 2017, la universidad EAFIT organizó la exposición Vivir era Crear: Leonel Estrada y María Helena Uribe, en conmemoración a la labor cultural de la pareja en la ciudad de Medellín.

Obras completas

  • Reptil en el tiempo (Novela) – 1986
  • Polvo y ceniza (Cuentos) – 1963
  • Un frío distinto (Cuento) – 1969
  • Círculo vicioso (Cuento) – 1984
  • Fernando González y el Padre Elías (Ensayo) – 1969
  • Cecilia Rico: su fauna y su arte primitivo (Ensayo) – 1982
  • Auto-minibiografía en gato gris. (Ensayo) – 1987
  • Fernando González. El viajero que iba viendo más y más (Ensayo) – 1999

Otras publicaciones

  • Uribe de Estrada, M. H. (1968, junio 15). El camino del amor en Fernando González. El Colombiano. Publicado de nuevo en El Colombiano 100 Años, «Especial obras periodísticas / 1964-1973», 2012, p.p.: 12 - 14. Recuperado de: https://www.otraparte.org/fernando-gonzalez/vida/uribe-mariahelena-2.html
  • Uribe de Estrada, M.H. (1965). «Fernando González» y «Antología de Fernando González». Revista Arco, (62).
  • Uribe de Estrada, M. H. (1970). «Lo Bueno y lo Feo en Fernando González». Revista Lámpara, (67).
  • Uribe de Estrada, M. H. (1972). Dos ensayos sobre Fernando González. Revista Universidad Pontificia Bolivariana, 33 (113). p.p.: 155 - 175. Recuperado de: https://www.otraparte.org/documentos/uribe-mariahelena-3.pdf

Cronología

  • 1928 : Nace en la ciudad de Medellín. (Antioquia, Colombia).
  • 1937-1939 : Viaja con su familia a Bruselas, donde continuó estudiando hasta el inicio de la Segunda Guerra Mundial. Es cuando retornan al país.
  • 1946 -1947: Continúa su formación en la ciudad de Nueva York, en el Marymount College de Tarrytown.
  • 1950 : Se casa con Leonel Estrada.
  • 1959 : Publica su primer cuento Polvo y ceniza. Con este cuento fue una de las finalistas entre los 515 enviados al Concurso Nacional de Cuento promovido por el periódico El Tiempo de Bogotá.
  • 1962 : Con el cuento El infierno alcanza una mención honorífica en el Concurso Nacional de Cuento.
  • 1963 : Publica su primera compilación de cuentos Polvo y ceniza.
  • 1964 : Muere su amigo el filósofo Fernando González.
  • 1969 : Publica su cuento Un frío distinto.
    • Publica su ensayo Fernando González y el Padre Elías.
  • 1982 : Publica su ensayo Cecilia Rico: su fauna y su arte primitivo.
  • 1984 : Publica su cuento Círculo vicioso.
  • 1986 : Publica su primera y única novela Reptil en el tiempo.
  • 1999 : Publica el libro de ensayos titulado Fernando González. El viajero que iba viendo más y más.
  • 2012 : Murió Leonel Estrada, con 91 años de edad.
  • 2015 : Muere el 16 de noviembre, por una enfermedad pulmonar.
  • 2017 : La universidad EAFIT organiza la exposición Vivir era Crear: Leonel Estrada y María Helena Uribe, en conmemoración a la labor cultural de la pareja en la ciudad de Medellín.

Véase también

Referencias

  1. Pérez, L. y Restrepo Jaramillo, E. (editores). (1932). Medellín en 1932. Medellín: Imprenta editorial, Librería Pérez.
  2. Olano García, H.A. (2018). María Helena Uribe de Estrada y sus 450 brocardos. Otra parte, 112 (192). p.259. pp. 257–306. Recuperado de: http://academiaantioquenadehistoria.org/revistas/index.php/repertorio-historico/article/view/2255
  3. Escobar Mesa, A. Diálogo compartido con María Helena Uribe. En: Revista de Literatura y Filosofía. (2004). Recuperado de: https://www.utp.edu.co/cms-utp/data/bin/UTP/web/uploads/media/literario/documentos/Revista-Literatura-y-Filosofia-II-PDF.pdf
  4. Escobar Mesa, A. María Helena Uribe de Estrada: intimidad y trascendencia. En: Jaramillo, M. M., Osorio,N. B., & Robledo, A. I. (1995). Literatura y diferencia: Escritoras colombianas del siglo XX. Santafé de Bogotá, D.C, Colombia: Ediciones Uniandes. p.283 Recuperado de: http://www.bdigital.unal.edu.co/51061/37/9586552020_P5.PDF
  5. Escobar Mesa, A. María Helena Uribe: La palabra afanosa y silenciada. Recuperado de: https://www.otraparte.org/corporacion/boletin/20151117-bol-132.html
  6. Escobar Mesa, A. Diálogo compartido con María Helena Uribe. En: Revista de Literatura y Filosofía. (2004). Recuperado de: https://www.utp.edu.co/cms-utp/data/bin/UTP/web/uploads/media/literario/documentos/Revista-Literatura-y-Filosofia-II-PDF.pdf
  7. Escobar Mesa, A. Diálogo compartido con María Helena Uribe. En: Revista de Literatura y Filosofía. (2004). Recuperado de: https://www.utp.edu.co/cms-tp/data/bin/UTP/web/uploads/media/literario/documentos/Revista-Literatura-y-Filosofia-II-PDF.pdf
  8. Escobar Mesa, A. María Helena Uribe de Estrada: intimidad y trascendencia. En: Jaramillo, M. M., Osorio, N. B., & Robledo, A. I. (1995). Literatura y diferencia: Escritoras colombianas del siglo XX. Santa fe de Bogotá́, D.C, Colombia: Ediciones Uniandes. p. 283. Recuperado de: http://www.bdigital.unal.edu.co/51061/37/9586552020_P5.PDF
  9. Restrepo, G. (2015, feb. 13). La Taberna del Ahorcado, fogón de creación. El Colombiano. Recuperado de: https://www.elcolombiano.com/director-por-un-dia/la-taberna-del-ahorcado-fogon-de-creacion-CX1231141
  10. El tiempo. (2016, enero 4). El legado literario de María Helena Uribe de Estrada. El tiempo. Recuperado de: https://www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-16472725
  11. Restrepo, G. (2015, feb. 13). La Taberna del Ahorcado, fogón de creación. El Colombiano. Recuperado de: https://www.elcolombiano.com/director-por-un-dia/la-taberna-del-ahorcado-fogon-de-creacion-CX1231141
  12. Universidad EAFIT. (2017). Exposición Vivir era Crear: Leonel Estrada y María Helena Uribe. [Folleto]. Recuperado de: http://www.eafit.edu.co/cultura/exposiciones/Documents/Gu%C3%ADaSalm%C3%B3n_VivireraCrear_2017_2.pdf
  13. García, J.I. (2016, enero 04). El legado literario de María Helena Uribe de Estrada. El Tiempo. Recuperado de: https://www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-16472725
  14. Universidad EAFIT. (2017). Exposición Vivir era Crear: Leonel Estrada y María Helena Uribe. [Folleto]. Recuperado de: http://www.eafit.edu.co/cultura/exposiciones/Documents/Gu%C3%ADaSalm%C3%B3n_VivireraCrear_2017_2.pdf
  15. Cardona Orjuela, X.E. (2016). Juegos discursivos en la obra de María Helena Uribe. Tesis de Magíster. Universidad Tecnológica de Pereira Facultad de Bellas Artes y Humanidades. p.12. Recuperado de: http://repositorio.utp.edu.co/dspace/bitstream/handle/11059/7826/C8646C268.pdf?sequence=1&isAllowed=y
  16. Escobar Mesa, A. María Helena Uribe de Estrada: intimidad y trascendencia. En: Jaramillo, M. M., Osorio, N. B., & Robledo, A. I. (1995). Literatura y diferencia: Escritoras colombianas del siglo XX. Santa fe de Bogotá́, D.C, Colombia: Ediciones Uniandes. p. 284. Recuperado de: http://www.bdigital.unal.edu.co/51061/37/9586552020_P5.PDF
  17. Escobar Mesa, A. María Helena Uribe de Estrada: intimidad y trascendencia. En: Jaramillo, M. M., Osorio, N. B., & Robledo, A. I. (1995). Literatura y diferencia: Escritoras colombianas del siglo XX. Santa fe de Bogotá, D.C, Colombia: Ediciones Uniandes. p. 284. Recuperado de: http://www.bdigital.unal.edu.co/51061/37/9586552020_P5.PDF
  18. Escobar Mesa, A. (2001). El Filósofo de Otraparte bajo el prisma de María Helena Uribe: dos ávidos de absoluto. Estudios de Literatura Colombiana, (8). p.54 Recuperado de: https://www.otraparte.org/documentos/escobar-mesa-augusto-1.pdf
  19. Uribe de Estrada, M.H. (s.f.). María Helena Uribe de Estrada (1928 - 2015). Corporación Otraparte. Boletín n.º 132. Recuperado de: https://www.otraparte.org/corporacion/boletin/20151117-bol-132.htm”
  20. García, J.I. (2016, enero 04). El legado literario de María Helena Uribe de Estrada. El Tiempo. Recuperado de: https://www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-16472725
  21. Escobar Mesa, A. (s.f.). María Helena Uribe. La palabra afanosa y silenciada. Corporación Otraparte. Boletín n.º 132. Recuperado de: https://www.otraparte.org/corporacion/boletin/20151117-bol-132.html
  22. García, J.I. (2016, enero 04). El legado literario de María Helena Uribe de Estrada. El Tiempo. Recuperado de: https://www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-16472725
  23. Vivas Betancourt, A.M. (2017). Narrativa de María Helena Uribe de Estrada: feminidad y culpabilidad. Tesis doctoral. Universidad Autónoma de Madrid. Recuperado de: https://repositorio.uam.es/bitstream/handle/10486/680815/vivas_betancourt_angelica_maria.pdf?sequence=1

Enlaces externos

Créditos

1. Diciembre de 2019. Investigación y texto Rocío del Pilar Garzón Vargas para Banrepcultural


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