Pilar Lozano Riveros
| Nombre | Pilar Lozano Riveros |
|---|---|
| Fecha de nacimiento | 29 de septiembre de 1951 |
| Nacionalidad | Colombiana |
| Ocupación | Escritora y periodista |
| Primaria | Colegio Departamental de La Merced |
| Bachillerato | Colegio Mayor de Cundinamarca, Instituto Pedagógico, El Pilar de Chapinero. |
| Estudios universitarios | Comunicación Social con especialización en periodismo. Pontificia Universidad Javeriana, Bogotá. |
| Formación profesional | Comunicadora social y periodista. |
| País de nacimiento | Colombia |
| Ciudad de nacimiento | Bogotá D.C |
| Familia | Elvira Riveros (madre); Carlos Lozano (padre); Juan Salvador Aguilera (hijo); Aitana y Lorenzo (nietos). |
Escritora colombiana nacida en 1951. Dedicó más de dos décadas al periodismo como reportera de prensa, radio y televisión. Fue corresponsal independiente del periódico El País de España. Se declara viajera enamorada de Colombia y se ha dedicado a conocer su geografía, su historia y a indagar las causas de sus conflictos. En los años ochenta, sin abandonar el periodismo, empieza a escribir para niños y jóvenes, combinando así por años periodismo y literatura. Sus viajes de periodista inspiraron varios de sus libros. Durante esa época y, de manera informal, se convirtió en promotora de lectura y tallerista buscando enamorar de la escritura a jóvenes y adultos.
Biografía
Tuvo una infancia feliz. Fue la tercera de diez hermanos, cinco hombres y cinco mujeres. Como eran tantos hijos y con edades tan seguidas, dice Pilar que no necesitaban a nadie que estuviera pendiente de ellos. Jugaban, hacían teatro y también mucho oficio en la casa. Junto con su hermana mayor le tocó ayudar a criar a sus hermanos, tarea que no recuerda como algo pesado, pues se las ingeniaba para que sus hermanos prefirieran los cuidados de Marta, la mayor. Salían a pasear con el abuelo, José Lozano. Vivían con la abuela materna, Ana Luisa Riveros, y con la tía Eva, a quienes recuerda con cariño.
En su casa hubo muchos libros, pues su papá, publicista autodidacta leía mucho y escribía poemas. Su mamá, maestra, era una mujer fuerte y sabia. Supo llevar muy bien la condición de bipolaridad de su esposo, de la que se enteraron sus hijos desde pequeños, y a quienes les enseñó a enfrentarla como a cualquier otra enfermedad.
Mamá católica, papá ateo, nunca sus padres le impusieron nada, recibiendo de este modo una educación muy liberal. Fue una niña inquieta, brincona, quien prefería los balones a las muñecas.
Desde pequeña empezó a sentir amor por la musicalidad de las palabras gracias a su hermano mayor, quien le leía y le cobraba este oficio con la carne del almuerzo o con el pan del desayuno. Los demás hermanos también leían y jugaban ajedrez. Uno llegó a ser campeón ajedrecista. Sin embargo, Pilar se negó a aprender un juego que para ella no era más que un ejercicio de pensamiento, y para eso ya tenía suficiente con el colegio.
En la adolescencia fue muy rebelde. Se volaba del colegio, y tenía pésima ortografía, pero era buenísima para la física y las matemáticas.
Al terminar el bachillerato no sabía qué quería estudiar, pensaba en algo que no tuviera que ver con español y que no la obligara a estar encerrada: agronomía, geología, ingeniería civil para construir puentes. Incluso, alcanzó a pensar en irse para el África con una amiga como misionera. La solución, sin embargo, se la dio su padre:
- -¡A usted le gusta todo! Estudie periodismo. En esa profesión debe saber de todo un poco.
Se presentó y pasó, pero con ingreso condicionado por mala ortografía. Los primeros tres semestres le representaron mucho sufrimiento en razón a su matrícula condicional. Perdió el cuarto semestre y pidió ser transferida a publicidad. Posteriormente, regresó a estudiar periodismo.
Trayectoria
Licenciada en Ciencias de la Comunicación Social por la Universidad Javeriana de Bogotá en 1971. Empezó a trabajar desde los dieciséis años. Estando aun en la Universidad fue profesora de kínder en un barrio popular de Bogotá. También estuvo vinculada con el DANE haciendo encuestas. Allí tenía fama de ser una encuestadora temeraria que no se asustaba por tener que ir a lugares que otros consideraban peligrosos. “Todos los sitios donde nadie quería ir, allí iba yo” (cita entrevista con Margarita Vidal). Este trabajo le permitió conocer muy bien a Bogotá. Posteriormente amplió su labor como encuestadora, fuera de Bogotá, participando en la Encuesta Nacional de Hogares, lo que le permitió empezar a conocer el país.
Su primer encuentro con el periodismo fue en el periódico de Consuelo Montejo donde cubría asuntos relativos a educación. Luego incursionó en la radio con Radio Todelar. De 1976 a 1990, hizo reportería y crónica para la revista Diners. Simultáneamente realizó reportería para el periódico El Tiempo.
Recién graduada fue jefa de prensa del entonces Instituto Colombiano de la Reforma Agraria -INCORA-, cargo que le permitió conocer Putumayo y aprender de la problemática de los campesinos, y del que tuvo que retirarse por su anunciada maternidad.
De vuelta a la reportería, integró el grupo de mujeres que, junto con Margarita Vidal, Consuelo Mendoza, Nohora Parra y María Isabel García, contribuyó a abrirles espacio en los medios de comunicación En esa época a las mujeres les tocaba cubrir lo que llamaban “el lado femenino de las noticias”, lo que quería decir cubrir las noticias de la moda, hacer notas sobre cocina, entre otros asuntos considerados “de mujeres”. Les tocó abrir espacios para poder escribir sobre política, deportes y otros temas que eran exclusivos de los periodistas hombres.
En los años ochenta, participó en un programa muy popular de Caracol titulado Llegaron las mujeres, junto con Tulia Eugenia Ramírez, Margot Richi, Amparo Pérez, quien era la directora, y Virginia Vallejo. También trabajó en Contrapunto con Jaime Soto y con Margarita Mesa.
Formó parte de una generación muy politizada y se vinculó al Movimiento Obrero Independiente y Revolucionario (MOIR) como militante. Al recorrer el país y visitar zonas tan alejadas y olvidadas se dio cuenta de la desigualdad, de las injusticias, de zonas donde el estado brilla por su ausencia, lugares donde no llegaban los servicios de salud, y donde no había escuelas, ni carreteras. Esta vinculación con el MOIR le enseñó mucho, pero también le trajo problemas con los medios donde trabajaba. Aunque ella argumentaba que su militancia y su profesión como periodista eran cosas diferentes, una vez sabían de su posición ideológica y de su vinculación con este grupo político, terminaban por echarla. Al periódico Tribuna Roja le debe, sin embargo, un gran aprendizaje: el ser rigurosa con el lenguaje.
Trabajó en El Tiempo, hizo colaboraciones en El Espectador, en la revista Mujer con Beatriz Zuluaga, poeta, pionera del periodismo y considerada por Pilar como una mujer brillante. También hizo periodismo institucional en la Corporación de Turismo.
Durante veintitrés años fue corresponsal en Colombia de El País de España, donde cubrió el conflicto armado en Colombia. También trabajó en la redacción española de la Duche Welle en Bonn Alemania.
Fue coordinadora académica, junto con Javier Darío Restrepo, de la parte periodística del curso Periodismo y Derechos de Infancia, convocado, entre otros, por UNICEF y por la Universidad de los Andes en 2012. Realizó talleres de capacitación a periodistas nacionales e internacionales en Brasil, Costa Rica y México en cubrimiento responsable en temas de infancia.
Cuando cumplió sesenta años dejó el periodismo por las demandas que trajeron consigo los cambios tecnológicos de la época. En su opinión, antes el periodismo tenía horario, después no, y le resultó agotador. Además, tuvo discrepancias fuertes con una colega de El País de España. Se refugió en la promoción de la lectura y la escritura haciendo talleres por todo el país, labor que le encanta. Ha estado vinculada a la Red Nacional de Escritura Creativa RELATA, como escritora asociada. Con esta Red ha visitado e impartido talleres en Aracataca, Buenaventura, Yopal, Armenia, entre otros muchos lugares.
Dentro de esta labor de promotora viajera de lectura y escritura, lo que más le gusta es impartir talleres de escritura, de tal manera que se ha recorrido el país participando de un sinnúmero de proyectos de esta índole, con niños, jóvenes y adultos de las comunidades más apartadas del país, donde casi nunca tienen acceso a este tipo de actividades. Es así como ha impartido talleres en Monterrey, corregimiento de Simití; ha participado en un proyecto con Argos en una vereda en zona de violencia del Magdalena Medio; ha logrado que los exguerrilleros narren por escrito sus experiencias en zonas alejadas, y ha participado con estos talleres en las Bibliotecas de Paz en Caloto Cauca.
Durante varios años apoyó los círculos de lectura y escritura en San Vicente del Caguán. Igualmente lo ha hecho con jóvenes vulnerables con la Coalición contra la vinculación de niñas, niños y jóvenes al conflicto armado en Colombia -COALICO-, una organización conformada por varias ONG. En fin, son innumerables los lugares en los que Pilar ha dejado su semilla por todo el país convencida de que todos podemos escribir.
Su primer libro para niños surge del periodismo. Escribió una serie titulada Las puntas de Colombia para la revista Diners la cual fue Premio Simón Bolívar. Quería contar cómo eran los sitios más alejados del país. Estaba obsesionada por una naricita que tiene Colombia entre Brasil y Venezuela. Cuando se acabaron las puntas de Colombia, decidió ir a Roncador y Quitasueños, dos cayos o islotes ubicados en el mar Caribe, al norte de la isla de Providencia. Viajó a San Andrés y desde allí tuvo la suerte de navegar en un barco oceanográfico, que es una embarcación acondicionada para las tareas de investigación científica. Este barco tenía tres laboratorios. En ese entonces la tecnología no estaba tan avanzada como ahora y para sacar las muestras botaban una botella gigantesca al mar. Pilar quedó sorprendida de esta práctica y hablando con el capitán quiso saber qué tan fascinados quedaban los niños con algo tan sorprendente. El capitán, muy serio, le respondió:
- -Aquí nunca se sube un niño. Los niños molestan mucho y no dejan trabajar. Nosotros necesitamos silencio, mucho silencio.
Ante una respuesta tan tajante, Pilar empezó a planear una clase de venganza literaria para lograr que los niños pudieran disfrutar de tal maravilla.
- -Espérese y verá…
De allí nació Socaire y el capitán loco, su primer libro para niños, que trata de una niña que hace una pequeña trampita y logra subirse a un barco oceanográfico. Su amiga, la ilustradora Olga Cuellar, hizo la prueba final del texto, lo ilustró y se lo llevó a Carlos Valencia Editores donde se publicó por primera vez. De esta manera, Pilar empezó su carrera como escritora de libros para niños y jóvenes.
En los viajes como periodista empezó a encontrar historias que luego se convirtieron en cuentos. Por ejemplo, La estrella que le perdió el miedo a la noche, nació en la Ciénaga Grande de Santa Marta. Cada cuento tiene un lugar exacto de dónde nació. El libro Crecimos en la guerra nace de ver a los niños sufriendo. Quiso contar qué sienten los niños en la guerra. En este libro son los niños los que narran. Tiene publicados veintitrés libros y de esos la gran mayoría tiene que ver con Colombia, lo bueno, lo malo, lo feo, lo bonito.
Su libro, Colombia, mi abuelo y yo, inspirado en su abuelo, José Lozano, fue publicado por primera vez en 1987 y se convirtió en un libro de geografía para los niños colombianos. Ha sido reeditado muchas veces después de actualizarlo.
En los últimos años se ha dedicado a investigar la historia de Colombia para contársela a los niños. La historia, los viajes y la abuela es una serie dividida en épocas. El primer tomo empieza en el momento en que llegan los primeros cazadores recolectores a lo que hoy es Colombia. Se trata de una abuela que viaja con sus dos nietos por el país buscando las huellas del pasado. Visita con los niños los lugares, pero ella previamente ha investigado y leído mucho de tal manera que puede explicarles de qué se trata y contarles la historia. La segunda parte es más compleja, pues es lo que ocurre durante el siglo XIX en el país, donde se dieron ocho guerras civiles y ocho constituciones. Para Pilar, la historia de ese siglo es la historia de la exclusión y la guerra, algo que infortunadamente no hemos superado.
Publicaciones
Libros infantiles y juveniles
- Socaire y el Capitán Loco, Carlos Valencia Editores, Bogotá, 1987; Editorial Panamericana, 1996.
- La estrella que le perdió el miedo a la noche, Carlos Valencia Editores, Bogotá, 1987; Editorial Panamericana, 2000.
- Colombia mi abuelo y yo, Círculo de Lectores, Bogotá, 1987; Editorial Panamericana, 1996.
- Los hijos de la lluvia, Unicef - Ministerio de Desarrollo, Bogotá, 1998.
- La hormiga que quiso acaparar el agua, Unicef - Ministerio de Desarrollo, Bogotá, 1998.
- La laguna que volvió a nacer, Unicef - Ministerio de Desarrollo, Bogotá, 1998.
- Francisco Javier Cisneros: el que comunicó con carriles las comarcas, Colciencias – Editorial Panamericana, Bogotá, 1997.
- José María Villa: el violinista de los puentes colgantes, Colciencias - Editorial Panamericana, Bogotá, 1997.
- Manuel Uribe Ángel: el médico y geógrafo que amó a su país, Colciencias - Editorial Panamericana, Bogotá, 1998.
- Turbel el viento que se disfrazó de brisa, Editorial Panamericana, Bogotá, 2001.
- Los que abrieron caminos en el cielo, Planeta, Bogotá, 2002; Los caminos del cielo, Panamericana, 2007.
- La guerra no es un juego de niños, Historias de una infancia quebrada por el conflicto, Intermedio Editores, Bogotá, 2005.
- La Paloma despistada y la sardina mensajera, Editorial Panamericana, Bogotá, 2007; Nueva edición Susaeta, Bogotá, 2024.
- ¡Plof! se desinflo una ilusión, Panamericana, Bogotá, 2010.
- Así vivo Yo, Random House Mondadori, Bogotá, 2011.
- Crecimos en la guerra, Panamericana, Bogotá, 2014.
- Era como mi sombra, Editorial Gran Angular, Bogotá, 2015; Alfaguara, Bogotá, 2023.
- Historias de un país invisible, SM, Bogotá, 2017; Panamericana, Bogotá, 2023.
- La historia, los viajes y la abuela, Alfaguara, Bogotá, 2019.
- La historia los viajes y la abuela II, Los terribles años decimonónicos, Suramericana, Bogotá, 2025.
Otros libros
- Historias y Lugares: ¿Por qué las estrellas no se caen y el mundo es como es? Coautora con Santiago Suárez, Fundación Secretos para Contar, Medellín, 2004. - El Hombre y su cultura. Coautora con Santiago Suárez, Fundación Secretos Para Contar, Medellín, 2006. - Travesía por un país olvidado. Crónicas, Palabras rodantes, Comfama - Metro de Medellín Medellín, 2022.
Otras publicaciones
- “Oro en la selva” en: Samper, Daniel (comp.), Grandes reportajes colombianos. - “Una niña con ojos como un par de almendras” en: Otros niños, Unicef - Áncora Editores, Bogotá, 1993. - “La Constituyente” en: Gran enciclopedia de Colombia, Círculo de Lectores, t. 2, Bogotá, 1992. - “Las mujeres latinoamericanas” en: Peter Hammer Verlag, América Latina, lo propio y lo ajeno, – Cinep, 1991. - “Myriam, la niña que arrulla los cuentos”, mensaje del día Internacional del Libro Infantil, Fundalectura-IBBY, Bogotá, 1992. - “Informe sobre la Sierra Nevada de Santa Marta”, World Resources Institute , 2001. - “Estamos cansados del jueguito de los armados” en Años de Fuego, - Grandes reportajes de la última década, Editorial Planeta, Bogotá, 2001. - “Turbel el viento que se disfrazó de brisa” en: Luz Mary Giraldo, Cuentos y relatos de la literatura colombiana, t. II, Fondo de Cultura Económica, 2005. - “Un hombre grande, de once años”. En: Atlántico, 30 historias de dos mundos, Editorial Norma. 2009 - “Un país de espaldas al drama de sus niños y niñas guerreros” en: Niños Vinculados al conflicto. Cubrimiento periodístico responsable, Manual, Medios para la Paz, 2009. - “Cuadros de esperanza en San Vicente del Caguán” en Crónicas – Premio Nacional de Paz- Fescol, Centro de Competencia en Comunicación para América Latina y el Caribe, 2010. - “Una escuela encaramada en zancos” en: Más allá de las promesas, crónicas de vida, Fonade, 2013. - “Una Tierra sin límites: Villavicencio” en: Los días del asombro. Poética de las ciudades, Editorial SM, Bogotá, 2015. - “Einer y sus sueños indestructibles”, en: Libros que cambian, El Espectador, Colombia, 2020, Octubre de 2017. - Las vías de la paz en: La revolución de la infraestructura Colombia más cerca, Ministerio de transporte, Julio de 2018. - “Se están llevando a nuestros niños y niñas; Hacer memoria de lo que tanto duele” en: Historias pendientes niños, niñas y adolescentes en el conflicto armado en Colombia, Coalico, 2021.
Enlace interno
Conversación: La literatura: una herramienta para acercar a niños y jóvenes a la realidad de la guerra https://www.banrepcultural.org/multimedia/conversacion-la-literatura-una-herramienta-para-acercar-ninos-y-jovenes-la-realidad-de-la
Enlaces externos
Pilar Lozano habla sobre la desigualdad y los niños y niñas en la guerra https://www.youtube.com/watch?v=oDwGH4PFQZ0
Pilar Lozano - Leer es volar TV https://www.youtube.com/watch?v=w7MKH5lLcSY
Pilar Lozano y la vida más allá de la guerra https://www.youtube.com/watch?v=gVAYnEeCAE8
Así comienza #CrecimosEnLaGuerra, de Pilar Lozano https://www.youtube.com/watch?v=cw5j7WaaszE
Pilar Lozano y su pasión por contar historias https://www.youtube.com/watch?v=ksQ422b7Q6U
Margarita da la nota con Pilar Lozano Riveros https://www.radionacional.co/podcast/margarita-da-la-nota/margarita-da-la-nota-con-pilar-lozano-riveros
Historiadetráslibros https://www.instagram.com/reel/DLk-szFtrrV/
Créditos
- Autora: Beatriz Helena Robledo⁎