Antonia Agreda

De Enciclopedia | La Red Cultural del Banco de la República
Antonia Agreda
Datos generales
Nombre Antonia Agreda
Fecha de nacimiento 1967
Nacionalidad Colombiana Bandera de Colombia }}
Ocupación Decana de la Facultad de Ciencias de la Educación y directora del programa en Etnoeducación en la UNAD
Primaria Escuela Reino Unido de Suecia
Bachillerato Escuela Reino Unido de Suecia
Estudios universitarios Licenciada en Lingüística y Literatura. Universidad Distrital
Formación profesional Lingüista, Magister en Supervisión y Administración Educativa, Doctora en Ciencias de la Educación.
Educación Doctora en Ciencias de la Educación. Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia UPTC. Magíster en Supervisión y Administración Educativa. Universidad Externado de Colombia. Licenciada en Lingüística y Literatura. Universidad Distrital
País de nacimiento Colombia, Bandera de Colombia }}
Ciudad de nacimiento Valle de Sibundoy. Municipio de Santiago, Putumayo


Antonia Agreda, lingüista y literata colombiana, nacida en el Valle de Sibundoy, departamento de Putumayo. Es reconocida por ser la primera mujer indígena en obtener el grado de doctora a nivel nacional. Perteneciente a la comunidad Inga y con una amplia trayectoria en diversas universidades nacionales, su trabajo se ha enfocado en fortalecer la educación intercultural, en buscar y fomentar la preservación, el reconocimiento y el dialogo entre las culturas indígenas y no indígenas del país, a través del intercambio de sus conocimientos, lenguajes e imaginarios.

Biografía

Antonia Agreda nació en el año 1967 en el Valle de Sibundoy. Pasó su niñez entre la ciudad de Bogotá y la vereda Arcanchi en el municipio de Santiago, departamento del Putumayo. Pertenece a los Inga, una comunidad indígena ancestral que, además de habitar en el departamento ya mencionado, se ubica en Nariño y en Caquetá. Los Inga son descendientes directos de los Incas y, por lo tanto, hablan su misma lengua, el quechua. Llegaron a esos territorios a finales del siglo XV bajo el título de Mitimak, considerados los expedicionarios militares o guardafronteras de las tierras del norte del Tahuantinsuyo –denominado el Chinchaysuyu en tiempos prehispánicos–, encargados de conquistar y controlar a otras comunidades indígenas de la región (Agreda, Agreda, & Uarmí-Yuyay, 2005).

A lo largo de su infancia, Antonia aprendió todos los conocimientos ancestrales de su comunidad a través de su madre. Relata que, a pesar de la presencia de misiones religiosas en la región, dedicadas a la enseñanza de la doctrina católica y del castellano, en su hogar siempre se habló en quechua, lo que le permitió tener un contacto más directo con la cosmovisión de su pueblo, sus tradiciones y modos de subsistencia. De hecho, el nombre de la vereda donde creció –Arcanchi– significa “los que resguardan y cuidan la naturaleza”; la educación de Antonia se basó en la relación con la naturaleza, a respetar el entorno, aprender a sembrar la tierra, a tejer y a descifrar los símbolos que hay en los tejidos, al igual que hablar correctamente el quechua. Del mismo modo, la educaron en los tres valores primordiales de la comunidad: no robar, no mentir y no ser perezosa.

Su familia llegó por primera vez a Bogotá como consecuencia de la pérdida territorial y la pobreza generalizada que se vivía en la región hacia las décadas del cincuenta y del sesenta del siglo pasado. Sus padres se dedicaron a la venta de artesanías y a practicar la medicina botánica tradicional de los ingas. Una vez radicados en la capital, Antonia ingresó a la Escuela Reino Unido de Suecia a los siete años de edad. Ahí aprendió a hablar correctamente el español y tuvo su primer contacto con la educación tradicional que se impartía en la urbe bogotana.

Concluida su formación escolar, Antonia se vio motivada a formarse en el ámbito de la interculturalidad, en el respeto hacia las culturas y en el acceso al conocimiento como base para el fortalecimiento y la dignificación de los pueblos indígenas. Por tal motivo, decidió estudiar licenciatura en lingüística y literatura en la Universidad Distrital, y luego especializarse de lleno en el campo de la educación; primero realizando un Magíster en Supervisión y Administración Educativa en la Universidad Externado de Colombia y, posteriormente, recibiendo el título de Doctora en Ciencias de Educación en la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia UPTC en el año 2009.

Con respecto a su vida laboral y profesional, Antonia Agreda trabajó en el Ministerio de Educación Nacional desde 1994 hasta el año 2001. Posteriormente, se desempeñó como profesora en la Universidad Francisco José de Caldas (2002-2004), Universidad Pedagógica Nacional (2005-2008) y, finalmente, en la Universidad Nacional Abierta y a Distancia UNAD desde el año 2009 hasta el presente. Actualmente, es Decana de la Facultad de Ciencias de la Educación y directora del programa de etnoeducación en dicha institución, enfocando sus esfuerzos en la formación intercultural, el respeto por las tradiciones propias de los pueblos indígenas y el diálogo de conocimientos entre comunidades. Pretende hacer de la interculturalidad una competencia profesional que permita superar los discursos históricos que enfrentan y separan a las culturas unas de otras. Por otra parte, se ha desempeñado como líder del pueblo Inga y fundadora de la primera escuela indígena intercultural bilingüe en el Distrito Capital y del Cabildo Inga de Bogotá, del cual fue su gobernadora entre los años 1994-1995 (Agreda, Agreda, & Uarmí-Yuyay, 2005).