Paula Andrea Patiño Bedoya
| Nombre | Paula Andrea Patiño Bedoya |
|---|---|
| Fecha de nacimiento | 29 de marzo de 1997 |
| Ocupación | Ciclista profesional |
| País de nacimiento | Colombia 
}} |
| Ciudad de nacimiento | La Ceja |
Paula Andrea Patiño Bedoya es una ciclista colombiana de ruta de 23 años. Creció en La Ceja, Antioquia, junto a sus padres y hermanos, quienes mostraron un gran interés por practicar varios deportes desde pequeños, entre esos el ciclismo. Su afición por montar en bicicleta llegó a tal punto que a pesar de su corta edad se vinculó con el Movistar Team, uno de los equipos más reconocidos de ciclismo a nivel internacional; además, es una de las grandes promesas de ciclismo femenino de ruta de Colombia y de Latinoamérica.
Biografía
Paula Patiño y sus inicios en el ciclismo con Hernando Gaviria
Paula Patiño nació el 29 de marzo de 1997. Creció con sus padres y sus dos hermanos (una hermana menor y un hermano mayor) en la casa de su abuela paterna en La Ceja. Allí toda la familia demostró un gran interés por el deporte. Asegura que empezó a entrenar baloncesto y atletismo en el Centro de Formación Deportiva de su municipio; deportes que le gustaban mucho. Sin embargo, su hermano, el primero de la familia en interesarse en el ciclismo, la animó a montar en bicicleta y a empezar a entrenarse en este deporte (entrevista telefónica).
Patiño nunca pensó en ser ciclista, mucho menos en volver esta disciplina su profesión. Pero empezó a salir cada día a las siete de la mañana con una bicicleta y un casco prestados por su hermano, quien ya hacía parte del Club de la Ceja, liderado por Hernando Gaviria, el padre del esprínter colombiano Fernando Gaviria. Con el apoyo de su familia, a los trece años decidió ser parte del club donde entrenaba su hermano y empezó a brillar.
Durante su proceso de formación y bajo la dirección de Gaviria, Patiño comenzó a destacarse en la categoría juvenil y en otras carreras locales. En 2016 su rendimiento la ayudaría a ingresar al equipo de Coldeportes-Zenú, entonces dirigido por Carlos Mario Jaramillo. Inicialmente, en ese mismo año, Patiño le dio la oportunidad al ciclismo de pista, en el que ganó una medalla de plata en la persecución por equipos en el Campeonato Nacional (Montes, 2019). Sin embargo, prefería el ciclismo de ruta: “soy colombiana, me gusta mucho la montaña y me defiendo más en ese terreno” (“‘El refuerzo del futuro’: Movistar presentó a la colombiana Paula Patiño”, 2018), afirma para referirse a su decisión de dejar la pista y competir en ruta.
El 2017 se convirtió en un año decisivo para su carrera ciclística. Tras ganar la medalla de bronce en los Juegos Bolivarianos y una victoria de etapa en la Vuelta a Colombia Femenina (Montes, 2019), el Centro Mundial de Ciclismo de la Unión Ciclista Internacional (UCI), una asociación de federaciones de ciclismo a nivel mundial, la escogió para entrenarse en Europa y competir en las diferentes carreras de esa temporada (“Paula Patiño”, s. f.). Según ella, todo se logró gracias a su entrenamiento con el profesor Gaviria en Antioquia y al apoyo constante de su familia.
En esa nueva etapa, Paula dedicó por completo su vida al ciclismo, incluso tuvo que dejar sus estudios de inglés para poder continuar con su entrenamiento.
Entrenamiento en Suiza
Pertenecer a este exclusivo grupo de ciclistas en el Centro Mundial de Ciclismo (Aigle, Suiza) fue una experiencia que marcó la vida de Paula. El Centro tiene como objetivo entrenar a ciclistas jóvenes, de diferentes partes del mundo, para que sigan su carrera como deportistas en equipos de talla mundial. Es también la plataforma para que equipos alrededor del mundo vean ciclistas que, a pesar de su talento, no tienen los recursos económicos necesarios para continuar con el objetivo de convertirse en ciclistas profesionales.
En Suiza entrenó durante dos años.
- Eso fue duro porque iba a salir por primera vez de mi casa. Al inicio fueron seis meses sin tener ningún contacto con Colombia. Todo eso cuesta, pero aguanté porque sabía que las oportunidades solamente se presentan una vez, y pensando así fue que mantuve la ilusión de hacer las cosas muy bien (Montes, 2019).