Qué es

La televisión es un gran invento del siglo XX, un increíble avance tecnológico que responde exclusivamente a la curiosidad humana por manipular, perpetuar y transmitir imágenes, que ante el ímpetu creativo logró las dimensiones que hoy tiene en nuestras vidas. Evidentemente el invento de la televisión no surgió en relación a necesidades del hombre, más que a la necesidad de satisfacer la curiosidad y el espíritu inventivo de algunos personajes con ideas brillantes. Y tal vez aquellos que comenzaron a experimentar con las imágenes y con los materiales que hicieron posible el invento de la televisión, jamás visualizaron que en el futuro, ahora nuestro presente, y el presente de muchas generaciones, la televisión sería unos de los medios de comunicación y de entretenimiento más poderosos en el mundo actual.

En sus inicios el sistema de transmisión de imágenes fue llamado Fototelegrafía y es sólo hasta 1900 en el Congreso Internacional de Electrónica cuando los países que contaban con las tecnologías más avanzadas aúnan esfuerzos para crear imágenes acompañadas de sonido, es allí donde se acuña el nombre de Televisión, que significa visión a distancia.

Si bien la televisión empieza a ser el medio de comunicación por excelencia en diferentes países del mundo incluido Colombia a mediados del siglo XX, los distintos descubrimientos que dieron origen a la cristalización del sueño de la transmisión de imágenes en movimiento comienzan a gestarse en el siglo XIX, así que revisemos cómo a partir de la experimentación se llegó al nacimiento de la televisión y la llegada de esta a nuestro país.

Historia

En 1817 JönsBerzeliusen Suecia descubre el Selenio, un metaloide que por sus propiedades fotoeléctricas, sería el elemento fundamental para la composición de la televisión, sin embargo en este momento nadie pensó en su utilidad. Igualmente pasaría con la demostración de los efectos electromagnéticos de la luz expuestos por Alexandre-Edmond Becquerel en 1839 en París. Pero solo hasta 1873, después de experimentar de distintas formas con el Selenio se detectó que el metaloide al ser iluminado con ciertas longitudes de ondas se podían recoger en un pantalla los electrones emitidos por este y reconstruir la imagen del objeto iluminado.

En la búsqueda de los dispositivos para la transmisión de imágenes en movimiento llamada inicialmente Fototelegrafía, el alemán Paul GottliebNipkow patenta el disco mecánico Nipkow de exploración lumínica, en 1884. Era un disco plano y circular que estaba perforado por una serie de pequeños agujeros dispuestos en forma de espiral partiendo desde el centro. Al hacer girar el disco delante del ojo, el agujero más alejado del centro exploraba una franja en la parte más alta de la imagen y así sucesivamente hasta explorar toda la imagen. Pero el Disco Nipcow, debido a su naturaleza mecánica presentaba problemas para funcionar eficazmente con tamaños grandes y altas velocidades de giro para conseguir una mejor definición.

Fue sólo hasta 1923 que el físico estadounidense de origen ruso Vladimir KosmaZworykin inventa el primer dispositivo satisfactorio para captar imágenes conocido como Iconoscopio. Esta cámara poseía unas fotocélulas nuevas y más sensitivas que se aplican a un nuevo tubo de cámaras y también al cine sonoro. El Iconoscopio necesitaba una enorme iluminación para poder captar las imágenes en forma adecuada, así debían ser imágenes tomadas en estudios con luces controladas, este aparato fue utilizado por mucho tiempo para televisar películas. Poco tiempo después el ingeniero de radio estadounidense Philo Taylor Farnsworth inventó el tubo disector de imágenes, dando estos dos inventos los inicios de lo que más delante sería el sistema de televisión electrónico.

Paralelamente, en este mismo año de 1923 el escocés John LogieBaird, tras algunos experimentos perfecciona el disco Nipkow a base de células del ya mencionado Selenio y en 1926 inventó un sistema de televisión incorporando rayos infrarrojos para captar imágenes en la oscuridad, este era un sistema mecánico. Inicialmente en 1928 se habían hecho trasmisiones experimentales a cargo de Jenkins desde la estación W3XK de Washington. El sistema de Baird fue perfeccionándose, y en 1928 él hizo realidad el primer envío de imágenes de televisión a través del Atlántico, de Londres a Nueva York. Después de lograr estas trasmisiones, en 1929, la BBC (British BroadcastCompany) de Londres puso su mira en el sistema desarrollado por Baird, y aseguró un servicio regular de transmisión de imágenes, el interés mostrado por el invento no era muy enérgico pues la BBC no veía una utilidad práctica concreta en el nuevo invento. Las transmisiones oficiales se iniciaron el 30 de septiembre de 1929 y la primera transmisión simultánea de audio y video finalmente tuvo lugar en 31 de diciembre de 1930.

Así fue como a finales de los años veinte se hicieron las primeras emisiones de Televisión, pero fue sólo hasta los años cincuenta que el sistema fue adoptado alrededor del mundo transmitiendo en los televisores en blanco y negro, y su uso extendido con distintos fines.

Siguiendo a la BBC, la CBS y NBC de Estados Unidos fueron las primeras en realizar las iniciales emisiones públicas de televisión, utilizando sistemas mecánicos y los programas no se emitían con un horario regular. Las primeras emisiones con un horario regular se produjeron en 1936 en Inglaterra y en 1939 en estados Unidos, siendo todas estas programaciones interrumpidas por la II Guerra Mundial.

El mexicano Guillermo González Camarena con sólo 17 años de edad construyó su primer televisor, patentó su invento de la televisión a color en su país natal y en Estados Unidos, el cual fue rápidamente difundido en varios países del mundo. González trabajaba en la radioemisora de la Secretaría de Educación, al mismo tiempo que experimentaba en su laboratorio, hasta que en 1934 fabricó su propia cámara de televisión. Comenzó a mejorar su equipo de televisión, y con la idea latente de darle color, desarrolló un Sistema Tricromático Secuencial de Campos , que patentó al ver que era posible adaptarlo al sistema de blanco y negro. Cuando tenía 23 años le fue otorgada la patente de dicho sistema con el número 40235, que partía de los colores primarios.

Los inventos de Vladimir KosmaZworykin, serían los que producirían una verdadera revolución en los sistemas de televisión, el tubo de rayos catódicos y el desarrollo del Iconoscopio darían paso a la televisión electrónica, que hacia los años cuarentas había desplazado la televisión mecánica. El reto ahora era la televisión a color y con ello la competencia creativa para sacarla delante, así Zworykin sugirió entonces estandarizar los sistemas de televisión que se estaban desarrollando en el mundo y tomando la palabra del científico ruso Estados Unidos creó en 1940 NationalTelevisionSystemComitee (NTSC ), que reguló las normas de fabricación de los aparatos de televisión, para que fueran compatibles entre las diferentes empresas americanas de fabricación de los aparatos. En 1942 se logró la estandarización del sistema válido en Estados Unidos.

Con el término de la II Guerra Mundial, las transmisiones y el desarrollo de tecnologías más avanzadas de la televisión se reanuda y el sistema es implantado en varios países de Europa y Estados Unidos inicialmente y muy rápidamente en América Latina. Los diferentes estudios realizados a fin de desarrollar la TV en colores, volvía a poner en jaque la compatibilidad que el público requería de los aparatos. Los intereses económicos de las grandes compañías presionaron fuertemente para que se adoptase un sistema de color no compatible a todos los aparatos. Aunque, ciertamente fue la gran cantidad de televisores vendidos en aquel entonces (sobre los 10 millones) lo que motivó el acuerdo de desarrollar una TV color plenamente compatible.

Solucionados los inconvenientes en la década de 1970, finalmente se logra la a aparición de la televisión en color y los televisores experimentaron un crecimiento enorme lo que produjo cambios en el consumo del ocio alrededor del mundo, el invento era cada vez más asequible al público.

A medida que la audiencia televisiva se incrementaba por millones, hubo otros sectores de la industria del ocio que sufrieron drásticos recortes de patrocinio. La industria del cine comenzó su declive frente a la entrada de la televisión.

Muy rápidamente los sistemas de televisión fueron mejorando, las tecnologías avanzaban y se perfeccionaban cada vez más, cada vez habían más canales, más productoras de programas para televisión. Para inicios de los años ochentas aparece la televisión satelital, alcanzando una gran expansión a nivel mundial. Para América Latina, a partir de 1984, la utilización por Televisa del satélite Panamsat para sus transmisiones de alcance mundial, permite que la señal en español cubra la totalidad de los cinco continentes. Hispasat, el satélite español de la década de 1990, cubre también toda Europa y América.

Fue entonces cuando alrededor del mundo se comenzó a recibir la señal de las producciones y los canales de televisión de todo el mundo, se comenzó a tener acceso a las culturas mas remotas y al conocimiento de las costumbres y acontecimientos de todos el mundo, tan solo presionando un botón de encendido.

El proceso de posicionamiento de la televisión, como medio de comunicación, de entretenimiento, y como fenómeno social, ha sido bastante vertiginoso, pues en tal solo 50 años de historia del uso público de la televisión, ahora es casi imposible pensar nuestras vidas sin ella. Los avances tecnológicos que vendrán de ahora en adelante solo las mentes ingeniosas de aquellos que trabajan para lograrlos sabrán lo que traerá el futuro.

La televisión en Colombia

La televisión en Colombia nace como un proyecto de Estado, que en ese entonces era militar, comandado por el general Gustavo Rojas Pinilla, quien había subido al poder en 13 de junio de 1953 y él mismo abanderó el sueño de traer la Televisión a Colombia. El interés de Rojas Pinilla por la televisión nace años atrás en 1936, cuando siendo entonces Teniente, viaja a Alemania en una misión encomendada por el gobierno de Alfonso López Pumarejo, para comprar municiones para enfrentar la guerra contra Perú. Estando en Berlín conoció el novedoso invento, que por entonces estaba siendo desarrollado en distintas partes del mundo. La idea quedó fija en la mente del militar, quería hacer posible el proyecto de traer la Televisión al país.

Tan pronto como Rojas Pinilla sube al poder, inicia las labores para conseguir las tecnologías y los insumos necesarios para poner en marcha la transmisión de la televisión en todo el territorio nacional. Para ello encomienda a Fernando Gómez Agudelo, quien se desempeñaba como el Director de la Radio Difusora Nacional, para gestionar todo lo relacionado a la puesta en marcha del proyecto. Varios problemas surgieron, pues ante la geografía tan abrupta de país, irradiar la señal era casi imposible, conseguir las antenas para superar este inconveniente no era tarea fácil. Gómez Agudelo se vio en la tarea de hacer consultas con los expertos europeos y estadounidenses para encontrar la solución efectiva, logrando encontrar los equipos adecuados, que eran fabricados por la empresa alemana Siemmens. Por medio del Ministerio de Hacienda en cabeza del Ministro Carlos Villaveces, se dio la orden de invertir 10 millones de pesos, una suma bastante sustancial para la época, para la compra de las antenas y demás tecnologías necesarias.

Se necesitaban de lugares bastante elevados para lograr la cobertura en la transmisión, así en Bogotá se escogió en Hospital Militar ubicado en los cerros orientales de la ciudad, que proveía un ubicación adecuada para la instalación de la antena que se elevaba a 30 metros de altura sobre el hospital. Se ubicaron a su vez las antenas repetidoras en el cerro del Gualí, en el nevado del Ruiz, que cubría Antioquia, Valle del Cauca y Caldas. Luego se instaló otra en el páramo de la Rusia para Boyacá. El reto fue inmenso, y a paso rápido y firme se iba acercando el momento de hacer realidad el sueño. La orden era entonces inaugurar la Televisión en Colombia el día del primer aniversario del gobierno militar en la nación. El día cero era el 13 de junio de 1954. Ante tanto reto operativo, nadie se percató de que en el país no había personas capacitadas en el manejo de las cámaras, ni expertos en la producción de televisión, y sólo unos días antes de la anunciada inauguración, se hizo visible la falencia. De inmediato el mismo Gómez Agudelo viaja a Cuba, donde pide la ayuda de 25 técnicos del Canal 11 de ese país, que acababa de quebrar, los técnico fueron contratados y así el traspiés fue solucionado.

Aún quedaban muchas tareas por hacer, se necesitaba acondicionar los estudios desde donde se iban a realizar los programas de las trasmisiones para televisión, el lugar escogido fueron los sótanos de la Biblioteca Nacional. Además de toda la infraestructura necesaria, era indispensable que los colombianos acotaran con los aparatos receptores, y con una fuerte publicidad se había logrado que 400 familias obtuvieran los aparatos. Sin embargo el número de receptores era bastante bajo, por tanto se diseñaron estrategias para que mas familias pudieran adquirir los aparatos, que para entonces tenían precios demasiado elevados, lo cual contrastaba fuertemente con la baja capacidad adquisitiva de los colombianos, pues para la época el salario mínimo d era de 120 pesos aproximadamente y un aparato Siemmens costaba 350 pesos. La estrategia era entonces importar 1.500 aparatos que se podían adquirir por medio del sistema de pago en bajas cuotas a través del Banco Popular.

Los primeros ensayos de las pruebas televisivas se hicieron el primero de Mayo de 1954, emitiendo la señal entre Bogotá y Manizales y algunos ensayos mas haciendo trasmisiones desde el almacén de J. Glotttmann en la calle 24 de Bogotá. Finalmente todo estaba listo en la víspera del 13 de junio, los medios de comunicación como la prensa y la radio hacían la fuerte difusión del acontecimiento que tendría lugar el día siguiente. La meta estaba casi cumplida y la hora cero pronta en llegar.

El 13 de Junio de 1954 es inaugurada oficialmente la Televisión en Colombia, como un servicio prestado directamente por el Estado, en el marco de la celebración del primer año de gobierno del general Gustavo Rojas Pinilla. A las 7 pm no solo se escuchan las notas del Himno Nacional de la República, lo realmente novedoso, es que el sonido viene acompañado de las imágenes de la Orquesta Sinfónica de Colombia. Seguido al Himno Nacional El general Rojas Pinilla se dirige al País desde el Palacio San Carlos, actual Ministerio de Relaciones Exteriores, y declara oficialmente inaugurada la Televisión en Colombia, La señal era recibida en Bogotá y sus alrededores por el canal 8 y en Manizales por el canal 10. Seguido al acto de inauguración se dio paso a la emisión de los primeros intentos de programas de entretenimiento , desde los estudios de la calle 24 con un programa animado por Álvaro Monroy Guzmán en el que también aparecieron Los Tolimenses. Además se montó la obra Tarde de Paul Vilar. La primera emisión tuvo una duración de tres horas y cuarenta y cinco minutos.

La imagen tenía una calidad excelente, se habían superado los distintos problemas técnicos en la instalación y puesta en marcha del sistema y la acogida fue inminente. La personas que tenían acceso a los televisores disfrutaron de inmediato del nuevo medio de comunicación, y para aquellos que no podían adquirir los televisores, el gobierno instaló televisores en algunas vitrinas de Bogotá y Medellín desde donde muchos vivieron el acontecimiento.

El primer reto se había logrado, lo que seguiría era mantener el sistema e idear las formas para que cada vez la televisión se posicionara mas y mas en la vida cotidiana de los Colombianos.

La empresa de la Televisión tenía unos ideales y principios claros que fueron formulados desde su carácter estatal. El gobierno en busca de herramientas para la divulgación cultural y la educación popular, encontró en la televisión el medio ideal que a su vez servía para difundir la imagen de las Fuerzas Armadas y el proyecto político de estas.

Poco a poco se fueron ampliando los espacios televisivos, que eran trabajados prácticamente con las uñas y casi siempre bajo la improvisación, pues no había una programación establecida, ni espacios de televisión concretos. Por lo regular se emitía un programa en directo y seguido uno pregrabado para dar espacio de acondicionar las escenografías y los vestuarios en estudio para la siguiente emisión. Unos meses después se abrieron los espacios para la propaganda, Se pusieron cuñas al principio y al final de los programas en Noticiero gráfico, creado para hacerle propaganda al gobierno; en el Lápiz mágico, con los mejores caricaturistas y patrocinado por el Banco Popular; Conozca a los autores, de corte educativo; Mares y marinos de Colombia; Esta es su vida. Los primeros espacios deportivos estuvieron a cargo de Carlos Arturo Rueda y otros especialistas de la radio.

Un año más tarde se gestó el organismo encargado del manejo y funcionamiento del nuevo medio, este se llamó la Televisora Nacional. Junto a la apertura de los espacios de propagandas se abrió la puerta a que la empresa privada comercializara los espacios televisivos.

Para 1956, se arrendaban los espacios en televisión y Alberto Peñaranda junto con su esposa crean la primera programadora privada Punch, al poco tiempo nace RTI creada por Fernando Gómez Agudelo, el mismo que había gestionado todo el proyecto de la televisión unos años atrás. Aparecieron también las empresas de publicidad como Atlas y MacCann, y algunas empresas privadas que alquilaban los espacios y con su patrocinio televisaban obras teatrales y musicales.

En la década de los sesenta, nace INRAVISION (Instituto Nacional de Radio y Televisión), tras una fuerte crisis económica de los fondos de la televisión estatal, que desemboca en el sistema mixto del manejo de la televisión en el país. Con esto, el sector privado manejaba la programación y la explotación de los espacios en televisión, pero era el Estado el que seguía siendo el dueño del medio.

Durante los primeros años solo existía una canal de televisión, y toda la programación era emitida por este, pero para 1967 nace un nuevo canal, que inicialmente se llamó Teletigreque era un canal local para Bogotá creado por Consuelo de Montejo, una popular política de la ciudad. El canal funcionó durante tres años y pasó a ser el anteriormente conocido Canal 9, después Canal A y ahora Institucional.

Aparece también Caracol Televisión, que como programadora realiza espacios para el canal 7. En 1970 se establece el Canal 11 de televisión educativa popular para adultos. Entre 1974 y 1979 se establece la televisión a color, que poco a poco fue implantada en el país. Solo hasta el primero de diciembre de 1979 es oficial la transmisión de los primeros programas a color, que en su mayoría eran franjas extranjeras.

Hacia mediados de los ochentas, se hicieron profundos cambios en el ente rector de la televisión en Colombia, así la tarea de INRAVISION pasa a manos de Consejo Nacional de Televisión, que ofrecía un espacio para que los representantes de la comunidad televidente participaran de dicho consejo.

A partir de 1985 comienzan a aparecer los canales regionales como Teleantioquia, Televalle, después conocido como Telepacífico y demás. Aparece el sistema de parabólica y la televisión por suscripción, que puso al acceso de todo de los colombianos la televisión realizada alrededor del mundo. La primera empresa de suscripción fue TV Cable que llegó a Colombia en 1987.

Entrando a la década de los noventas, tras la Constitución nacional de 1991, y la promulgación de la libertad para crear medios de comunicación y la necesidad de un ente autónomo para vigilar la televisión, en 1995 bajo el gobierno de el presidente Ernesto Samper Pizano se crea la Comisión Nacional de Televisión (CNTV). Con este nuevo ente rector y con la libertad de crear nuevos medio de comunicación, el 1997 la CNTV adjudica la licitación de los dos canales privados Caracol y RCN televisión, que entran en funcionamiento en 1998. En los años siguientes aparecen varios canales locales y unos otros regionales, como es el caso de CityTV, Canal Capital, entre otros.

La ampliación de la oferta en programación y nuevos formatos de televisión, hizo entrar en crisis a los tradicionales canales públicos 9 y 7 que para entonces eran canal Uno y A, y con ello desaparecen las más reconocidas programadoras como Tevecine , Punch, JES y Cenpro. La CNTV preocupada por la eminente desaparición de los canales público, formula distintas estrategias de salvamento de estos dos canales, por medio de concesiones en los espacios a las programadoras sobrevivientes, y finalmente en 2003 el Canal A desaparece como canal comercial para darle paso a Señal Colombia institucional.

Ahora es la televisión privada la que manda la parada en el país, y desde luego la televisión por cable. Esta historia de profundos cambios en la televisión es el reflejo de los distintos momentos históricos del ámbito político y social del país y en el mundo, para lo cual la televisión más que un medio de entretenimiento y de comunicación, es un fenómeno social, un documento histórico, un elemento activo en la construcción de la memoria colectiva para todos.

Géneros

En 50 años de historia, los espacios en televisión han tenido grandes cambios. Los géneros se han transformado, han evolucionado, otros han desaparecido, respondiendo a la entrada de nuevos tiempos en el medio, así como otros han surgido en nuevos formatos, y han tenido un éxito arrollador en las audiencias. Desde el teleteatro, pasando por el melodrama, los programas deportivos y culturales, hasta llegar al hoy popular formato del Reality Show, se han mostrado cambios en las tendencias y gustos de los televidentes, así como en la forma de hacer y pensar la televisión. A continuación haremos un recorrido por los principales géneros que han sido más significativos en la televisión colombiana.

El teleteatro

El teleteatro es el primer género televisivo visto por los colombianos. Dadas las condiciones de la televisión en directo, que marcó el ritmo de producción en los primeros años de la televisión, el teleteatro encontró el ámbito perfecto para establecerse. Dos procedencias tendría el teleteatro por sus características; La primera relacionada con el teatro, pues al ser transmitido en directo era asimilado a este, así como por los tiempos de duración, la adaptación de libretos de grandes obras de la literatura y del teatro. Y la segunda procedencia serían las Radionovelas, que con el manejo de la ficción, darían origen a la creación de historias para el teleteatro. La conjunción de estas, teatro y radionovela, darían paso a la consumación de teleteatro, que además conjugaba a las personas más prominentes del teatro y de la radio, que aunaban esfuerzos y produjeron inolvidables imágenes que han quedado en el recuerdo de los colombianos. El teleteatro sería un genero de increíble acogida, su tiempo en la televisión sería intenso y muy corto, pues fue solo durante la década de los 50’s que el teleteatro estaría en las pantallas de los colombianos. Solo 10 años de historia que han quedado en la memoria del país. Las principales producciones de teleteatro durante los cincuenta fueron: El cartero del Rey de Rabindranath Tagore; Espectros de Visen; Todos los hijos de Dios tienen alas de Eugene O´Neill; El matrimonio de Gogol; Una mujer sin importancia de Oscar Wilde; Padre de AugustreStrindberg; entre otros. Los directores y creadores mas reconocidos entonces eran Bernardo Romero Lozano, y Manuel Medina Mesa. Los principales actores y actrices de teleteatro fueron, Carlos Muñoz, Carmen de Lugo, Mónica Silva, Irma Roy, Eduardo Cuitiño, entre otros.

La telenovela

La telenovela nace en Colombia en la década de los sesenta con las primeras producciones de melodrama en los cuales, inicialmente se hacían adaptaciones de novelas clásicas de la literatura, o se basaban en los radiolibretos ya existentes. En el melodrama se conjugaban historias de amplios sectores de la sociedad, con la mezcla de intrigas y prevenciones secretas, que desembocaban en un final feliz para los personajes principales, y tenían un toque de justicia que marcaría el devenir de cada personaje en la historia. Al inicio de la telenovela, las producciones eran realizadas por productoras privadas, los horarios no estaban establecidos y los tiempos por capítulo eran mucho más cortos del que se manejo hoy en día.

El género fue evolucionando poco a poco, respondiendo a las formas de producción, los requerimientos del mercado y las tendencias y preferencias de los televidentes. En sus primeras producciones las telenovelas acogían temáticas que reflejaban realidades del país, que identificaban el melodrama con lo popular, esto hizo que la telenovela colombiana creara una identidad propia, que se diferenciaba fuertemente de las producciones venezolanas y mexicanas que mandaban la parada en latinoamérica. Aunque en los años setenta y ochenta estas telenovelas tuvieron grandes espacios en la televisión colombiana, el mismo estereotipo hegemónico de melodrama con personajes e historias recurrentes, generó el reto para la producción colombiana de airear las expectativas de los televidentes colombianos. Después de los setentas las telenovelas colonizaron las pantallas, así eran transmitidas diariamente y eran parte de la programación de diferentes franjas en el día.

Entre los setenta y ochentas se marcó una tendencia de la telenovela que marcaba el retorno del relato literario, pero ahora de carácter nacional, convertido en un producto de consumo televisivo. Así se adaptaron grandes obras de la literatura colombiana, que en formato de telenovela, fueron rápidamente acogidas por los televidentes. Obras como La mala hora de Gabriel García Márquez; La María de Jorge Isaacs; La Vorágine de José E. Rivera; entre otras fueron las de mayor audiencia. En los ochenta específicamente, la telenovela aborda otras dimensiones, incorporando lo cómico, lo irónico, mezclado con las identidades regionales del país. Producciones como Caballo Viejo, San Tropel y Gallito Ramírez, fueron algunas de las más representativas de esta época. Para los noventas la telenovela tomó una línea más dinámica en sus temas, respondiendo a las necesidades de innovación y de abordar contextos más reales, manteniendo el toque de la fantasía y la ficción de la telenovela. Las historias mezclaban entonces temas que entremezclaban lo local y regional con el entorno mundial, los grandes mercados y el melodrama común de la mujer pobre y bella que se enamora del galán, que en este caso era el gran empresario. Este es el caso de Café con Aroma de mujer y Betty la Fea, las dos del escritor Fernando Gaitán. También las telenovelas de Mauricio Navas y Mauricio Miranda, donde la vida ejecutiva se entrelaza con las intrigas, el poder y el amor.

El momento actual de la telenovela en Colombia es un momento de grandes transformaciones que han superado la producción nacional y están pasando al mercado de la globalización, donde las grandes productoras y canales transnacionales, están marcando las pautas de la integración audiovisual de América Latina, desnacionalizando las telenovelas y concibiendo un modelo único, del melodrama convencional, que refleja folclóricamente un estereotipo latinoamericano.

El dramatizado

Este innovador género tiene sus inicios en los años setenta y es uno de los géneros televisivos más importantes en la historia narrativa de la televisión colombiana. En formato de seriado de capítulos semanales de una hora, el dramatizado trataba temas novedosos, que a diferencia de las telenovelas, manejaba personajes más reales y complejos, y una gran riqueza de situaciones que iban más allá de lo estereotípico de las telenovelas. Desde la adaptación de obras literarias colombianas y latinoamericanas, hasta el tratamiento de profundas problemáticas sociales, como la delincuencia, el narcotráfico, el secuestro, la corrupción, la pobreza, este género traspasó los límites narrativos de otros géneros y abrió la puerta a la controversia y la deliberación social, mezclado con una ficción que reflejaba fuertemente la realidad.

En la realización del género participó gran parte de los directores y guionistas más reconocidos de la televisión colombiana. Igualmente contó con la ayuda de extranjeros como Manoel Calos, libretista brasileño, y David Stivels, director argentino, quienes brindaron un gran aporte a la creatividad colombiana.

Sin duda, el desarrollo del dramatizado como género tuvo un fuerte efecto sobre otros géneros como la telenovela, indicando caminos para la innovación y el redireccionamiento creativo que tuvo este ultimo género en los años recientes. Aunque la acogida del dramatizado fue bastante bueno por el público televisivo, en los últimos años las producciones de este orden han sido pocas, al punto de casi desaparecer de la programación. El género quedó relegado y fue olvidado por los grandes productores y realizadores actuales. Entre los dramatizados que podemos recordar encontramos Cuando quiero llorar no lloro, más conocido por el público como Los victorinos; La estrategia del escorpión; Amar y vivir; El fiscal, entre muchos otros.

La comedia

La televisión colombiana no ha tenido una larga tradición de producción humorística, por lo menos no tan arraigada como otros países latinoamericanos como México, donde el humor popular ha sido bastante trabajado en las producciones televisivas. Sin embargo los programas de humor son los que más tiempo han durado en la televisión nacional, como es el caso de Sábados Felices que en formato de concurso, mezclado con sketches preparados por actores cómicos, acudía al chiste como forma de humor. Una gran diferencia se vislumbra entre los programas de humor colombiano y los de otros países, y es que mientras en otros países se alude a lo popular, al elemento tradicional e identitario del campo y los arraigos, el humor nacional ha tenido un toque muy urbano y más crítico.

Algunos estudiosos de la televisión colombiana como Germán Rey, encuentran cuatro momentos claves que marcaron giros en la comedia colombiana en televisión, iniciándose con las propuestas tempranas de comedias que mostraban cuadros costumbristas, ligado al contexto familiar y que con humor mostraban los cambios de la sociedad colombiana, este es el caso del popular programa conocido durante las décadas de los sesentas y setentas Yo y Tú, dirigido por la española Alicia del Carpio.

Un segundo momento es el del popular Don Chinche, mucho más centrado en los aspectos pintorescos de la vida del barrio popular en Bogotá, era una comedia que trataba la dualidad de lo rural y lo urbano presentes en estos barrios capitalinos, que además hacía fuertes críticas mostrando preocupación por los problemas del país. Don Chinche interpretado por el actor Héctor Ulloa, tuvo su momento de más éxito durante los años ochenta.

Para un tercer giro en la comedia colombiana es la creación de Daniel Samper y Bernardo Romero Pereiro, llamada Dejémonos de vainas, que con ironías trataba temas implícitos de la cotidianidad de una familia de clase media colombiana completamente urbana entre las décadas de los ochenta y noventa, que además demarcaba las relaciones regionalistas del país.

El cuarto momento marca tal vez un giro más radical, y es el del humor crítico y de opinión política, alude a la parodia y a la ridiculización de los acontecimientos nacionales de actualidad, conflictos sociales y política del país. Este es el caso de programas como Zoociedad, del humorista y político Jaime Garzón en los noventa, quien fue asesinado a finales de esta década; y actualmente La banda de RCN, programas que con un sentido social muy fuerte apelan al humor negro y sarcástico, mezclados con una carga de irreverencia frente a las realidades nacionales, que se reflejaba concisamente en otros programas como La Tele o El siguiente Programa con una aire más juvenil, de los ya emblemáticos Martín de Francisco y Santiago Moure. La comedia en Colombia finalmente, ha mostrado distintos matices dependiendo de las tendencias y momento históricos del país desde la llegada de la televisión. Algunos intentos ha habido de comedia ligera que imita formatos extranjeros, que sin mayor trascendencia han tenido poca acogida de la teleaudiencia.

Los noticieros

El noticiero es tal vez uno de los espacios en televisión de mayor interés en el país, y si bien hay una amplia oferta de programas de noticias, durante muchos años, desde la llegada de la televisión hasta la entrada de los años ochenta, los noticieros siguieron el formato de los informativos radiales, sin contar con una identidad propia, ni aprovechaban las ventajas de lo visual para las emisiones. Esto debido esencialmente a la intervención estatal en la asignación de los espacios de noticias, organizadas en torno a las fuerzas políticas del país, si embargo la participación de distintas opiniones políticas garantizaba la diversidad de puntos de vista y el pluralismo informativo. Algunos de esos noticieros de la época fueron el Noticiero de Punch, TvHoy,Noticiero 24 Horas , entre otros, algunos de conservadores y otros liberales.

Para los años ochenta el programa de noticias fue adquiriendo poco a poco más identidad y salieron al aire otros espacios como el Noticiero Criptón, Noticias 1, El noticiero de las 7 y más, que presentaban nuevos formatos informativos, y dan mayor centralidad a los presentadores teniendo más versatilidad.

Con la llegada de los canales privados se consolidan los Noticieros Caracol y RCN, que apelando a los avances tecnológicos y a las nuevas propuestas audiovisuales toman mas fuerza y variación, quitando lo esquemático de los antiguos telediarios. El carácter privado de los canales abre las puertas a la experimentación y mayor autonomía que consolida la estructuración de los sistemas informativos de forma más completa y compleja, aunque han sido criticados fuertemente por la ausencia de contexto, el excesivo espacio y mezcla con el espacio de la farándula y una ligereza en el análisis de las noticias. A cada momento surgen nuevas propuestas y formatos que enriquecen el panorama noticioso de la televisión colombiana, esto alimenta igualmente el pluralismo informativo que ha caracterizado el sistema de noticias en televisión en el país.

Franjas

Para el manejo de pautas en TV se han definido 4 franjas de audiencia así:

  • Day Time entre las 6:00 a.m. y las 12:00 m.
  • EarlyFringe, entre las 12 y las 19 horas.
  • Prime Time, entre las 19 y 22:30 horas.
  • Late Fringe, desde las 22:30 hasta el cierre.

Con el medio Televisión es bastante marcado el interés de los anunciantes hacia el horario Prime Time, por cuanto permite una mezcla interesante entre televidentes Heavy Users y televidentes ligeros, aunque con un alto índice de televisión compartida, particularmente entre padres e hijos. Este horario ofrece un buen nivel de lealtad por la calidad de la programación en TV pero con un relativo índice de retención de los mensajes de productos y servicios, por la gran saturación de marcas de una misma categoría y la incidencia del control remoto que neutraliza la recordación publicitaria. Esto nos lleva a pensar que si la demanda fuerte de TV se concentra en los horarios Prime, donde disminuye el poder de retención/recordación publicitaria, se concentran muchos productos de la misma categoría por lo interesante de los ratings. En este caso, el medio TV requiere el concurso de la Radio para lograr una mezcla integral de medios con presencia competitiva en frecuencia de contacto altamente rentable.

Manejo por audiencia

La experiencia del Planificador de Medios y los estudios de eficiencia que hacen las agencias y centrales de medios, a través de los optimizadores de pauta, han llevado a la conclusión que la efectividad no depende tanto de pautar más comerciales sino de hacerlo de una manera eficaz en los horarios de mayor audiencia y en una proporción técnicamente balanceada. Además, de la utilización adecuada de las franjas depende la optimización en alcance y frecuencia de la pauta. Es así como con estos mecanismos se pueden obtener dos o más alternativas de pauta con la misma cantidad de TRP´s pero con diferentes resultados en reach y frecuencia de contacto. En Radio, con toda la diversidad de franjas y perfiles de programación, se pueden lograr planes eficientes de excelente rentabilidad.

Clasificación por audiencia

Se clasifican en:

  • Infantil – Lunes a viernes de 3:55 a 4:55 p.m.
  • Infantil – Fin de semana y festivos de 8:00 a 10:00 a.m.
  • Familiar – de 6:00 a.m. a 3:55 p.m. y de 4:55 a 10:30 p.m.
  • Adultos – de 10:30 a 12:00 p.m.

Personajes

Pioneros y políticos

El montaje de la televisión en Colombia en 1954, fue un esfuerzo formulado por personajes visionarios de la vida nacional, que entre políticos, funcionarios públicos y empresarios. Indudablemente el Político y pionero más prominente del la televisión nacional es el General Gustavo Rojas Pinilla, de quien nació la propuesta de poner en marcha el proyecto. El general, presidente de la república en el periodo de 1953 a 1957, subió al poder e representación de la dictadura militar que asumía las riendas del país tras el golpe de opinión que llevó al fracaso del gobierno anterior encabezado por Laureano Gómez. El General nacido en Tunja en 1900, es recordado por ejercer un una muy buena gestión el lo económico y social para el país, sin embargo tras algunos años de dictadura militar, el pueblo en medio de protestas se pronunció en contra del dominio militar, por lo cual el General renuncia a su cargo y se da una transición de nuevo al gobierno civil.

Es el mismo Rojas Pinilla, quien designa las labores de materialización del proyecto al Abogado y funcionario público Fernando Gómez Agudelo, quien muy joven había sido nombrado Director de la Radiodifusora nacional. El sería entonces uno de los pioneros más activos de la televisión nacional. A parte de su inconmensurable labor para sacar adelante el proyecto, Gómez Agudelo desde 1953 hasta su muerte en 1993 siguió vinculado al medio, tiempo en el cual creo y presidió la programadora RTI, la más antigua en la televisión nacional.

Junto a Gómez Agudelo, otro pionero estaría en la implementación del proyecto Joaquín Quijano Caballero, Ingeniero especializado en telecomunicaciones, que tras haber vivido muchos años en Alemania, llega al país durante la segunda Guerra Mundial, y es designado por el gobierno para la instalación de la red principal de la Televisión Nacional, tarea que se extendería desde 1954 hasta 1961. Muchos otros personajes de la vida nacional tendrían importancia fundamental como pioneros de la Televisión en el país, la lista sería interminable, entre ellos se podrían contar a Jorge Luis Arango , quien sirvió como mediador entre Rojas Pinilla y Gómez Agudelo en los informes y avances de la adecuación del sistema de televisión y adelantó los contactos con la Siemens, empresa que se encargaría de proveer los equipos necesarios para el sistema.

Igualmente políticos podríamos nombrar muchos, más aún teniendo encuentra el estrecho lazo que siempre unió a la televisión con la vida política nacional, entre ellos Consuelo de Montejo, la creadora del canal Teletigre el 1967, quien era una reconocida política en Bogotá, así como muchos otros que desde su condición de políticos apostaros esfuerzos y crearon espacios en la televisión, especialmente en los noticieros. El reflejo de ello se puede percibir aún hoy, cuando vemos una constante fluctuación de Políticos que son presentadores, actores que se convierten en políticos, políticos que promueven la televisión nacional.

Los empresarios

El desarrollo tecnológico y la evolución de la televisión como medio, contó con la participación activa de una serie de personajes que con una amplia visión empresarial formaron industria de la televisión, o que desde sus propias industrias apuntaron sus inversiones y esfuerzos al medio de comunicación. Algunos de los más reconocidos y de más amplia trayectoria han sido Julio E. Sánchez Vanegas y Jorge Barón, quienes crearon las productoras Producciones JES y Jorge Barón Televisión respectivamente. El primero de ellos fue el maestro de ceremonias encargado de la trasmisión inaugural de la televisión colombiana en 1954, desde entonces ha estado vinculado al medio. Poco a poco fue realizando producciones hasta formar su empresa, fuertemente reconocida por los colombianos. Con Producciones JES, sacó al aire programas en diversos formatos como Concéntrese, Panorama, Ojo al Arte, y algunos dramatizados como Sangre de Lobos y La maldición del Paraíso. Por su Parte Jorge barón se inició como Locutor de Radio en su ciudad natal de Ibagué. A los 16 años de edad, al llegar a Bogotá unos años después, gracias a Sánchez Vanegas tiene una oportunidad en la Radio La voz de Colombia. Con su fuerte ingenio empresarial se empezó a abrir campo en la radio y la televisión, hasta lograr su sueño de tener un espacio concreto en la televisión que se inicia con El Show de las Estrellas, y más adelante forma la productora Jorge Barón televisión, que actualmente sigue vigente, siendo una de las de más larga trayectoria.

Otros de los empresarios más importantes han sido Fernando Londoño Henao, quien se desempeñó como secretario general de Caracol en los sesenta, y posteriormente formó su productora Fernando Londoño Televisión. Samuel Duque, quien con el respaldo de un empresario también, de los emporios económicos más fuertes en Colombia Carlos Ardila Lülle, ponen en marcha el proyecto de RCN televisión. Así como el otro emporio económico en cabeza del empresario Julio Mario Santodomingo, con el Canal Caracol.

En pantalla

Hablar de los personajes más reconocidos de la pantalla chica en Colombia es una tarea difícil y bastante extensa, pues afortunadamente nuestra televisión ha contado con la presencia de una larga lista de personajes diversos que gracias a su carisma han calado en los corazones y la memoria del los televidentes. Contando con directores, libretistas, actores, presentadores, periodistas, protagonistas de concursos en formato Reality Show, y demás personajes coyunturales que lograron una gran trascendencia, se tendrían que nombrar a la mayoría por su importante presencia en el medio, sin embargo, se nombraran algunos que, seguramente serán inminentes en la memoria del lector. Desde aquellos que se pueden llamar personajes pioneros en pantalla y detrás de ella, ingeniándose el precario arte de hacer televisión por aquellas tempranas épocas de los años cincuenta, y que perduraron por muchos años como lo son Alicia del Carpio, la querida actriz y directora española; Los querido Tolimenses, que con su humor costumbrista y bastante crítico alegraron por medio de la televisión a los colombianos, desde la misma inauguración de la emisión al país. El Gran actor Carlos Muñoz que deleitó a los televidentes con sus múltiples personajes, y ahora desde lo institucional sigue trabajando por el medio. El entonces pequeño actor Bernardo Romero Pereiro y su padre Bernardo Romero Lozano, quienes hasta sus últimos días trabajaron con toda su creatividad y capacidad artística por la televisión nacional como un arte. Doña Gloria Valencia de Castaño, a quien recordamos por su gran labor como presentadora y más que todo en el programa Naturalia. La inigualable voz de Otto Grefestein, que como presentador de programas como Panorama, aportó a la cultura del país. Igualmente Fernando González Pacheco, el querido español que nos acogió como patria y que acogimos como colombiano y que ha acompañado a muchas generaciones desde la pantalla, presentado diversas facetas como presentador, actor, periodista, hasta el presente. Señoras actrices como Teresa Gutiérrez, Raquel Ercole, Judy Henríquez, entre muchas más que se podrían nombrar; actores como Enrique Tobón. Directores y Escritores como Kepa Amuchastegui, Jorge Alí Triana, Pepe Sánchez, que aún hoy continúan creando maravillosas producciones. Queridos actores de trayectoria como Carlos el Gordo Benjumea, o aquel personaje inolvidable interpretado por Héctor Ulloa, Don Chinche. Las divas, que además con mucha controversia tentaron los deseos de muchos televidentes Amparo Grisales y Margarita Rosa de Francisco, que con un don artístico inigualable han marcado hitos en la televisión nacional. Aquellos otros personajes muy reconocidos y queridos por su labor en televisión como el periodista Darío Arizmendi, entre otros. El comentarista deportivo Edgar Perea y todos aquellos que han hecho un gran camino en la crítica deportiva. El hombre que nos dio la oportunidad de viajar por todo el mundo a través de la pantalla en El mundo al Vuelo, Héctor Mora. El querido J Mario, que vendría a formar parte de una segunda generación en presentación heredada de Pacheco y Gloria Valencia. El tristemente desaparecido Jaime Garzón, que con su poderosa sátira y sentido crítico nos hizo reír de la dura realidad nacional. Finalmente una nueva generación que se forja con gran fuerza y versatilidad que enriquece la pantalla con nuevos y atrevidos formatos, como lo es el intrépido Pirry, los otros nuevos presentadores, los nuevos actores, aquellos que se atreven a poner su vida ante el ojo de un público desconocido participando en Realities, y mucho, muchos más, que se podrán encontrar en la memoria de cada uno de los colombianos.

Legislación

Artículos Constitucionales

Constitución Nacional de 1991

Artículos:

20, 75, 76, 77, y 365

Leyes

  • Ley 014 DE 1991

Descripción: "Por la cual se dictan normas sobre el servicio de televisión y radiodifusión oficial".

  • Ley 182 de 1995

Descripción:"Por la cual se reglamenta el servicio de televisión y se formulan políticas para su desarrollo, se democratiza el acceso a éste, se conforma la comisión nacional de televisión, se promueven la industria y actividades de televisión, se establecen normas para contratación de los servicios, se reestructuran entidades del sector y se dictan otras disposiciones en materia de telecomunicaciones".

  • Ley 335 de 1996

Descripción:"Por la cual se modifica parcialmente la Ley 14 de 1991 y la Ley 182 de 1995, se crea la televisión privada en Colombia y se dictan otras disposiciones".

  • Ley 506 de 1999

Descripción: "Por la cual se modifica el artículo 58 de la Ley 182 de 1995"

  • Ley 680 de 2001

Base Normativa y Jurisprudencial – Compilación a julio de 2002 –

Descripción: El servicio público de televisión fue inaugurado en Colombia el 13 de junio de 1954 por el Presidente de la República, General Gustavo Rojas Pinilla, como un servicio del Estado.* Información tomada de la página de la Comisión Nacional de Televisión (http://www.cntv.org.co)

Decretos

Decretos

Año 2005

  • Decreto 002244 del 1 de julio de 2005

Año 2001

  • Decreto número 277 de 2001

Descripción: “Por el cual se reglamentan los literales c) y d) del artículo 1º de la Ley 335 de 1996”.

  • Decreto número 590 de 2001
  • Descripción: " Por el cual se modifica el literal C) del artículo 13 del Decreto 277 del 19 de febrero de

2001 y se establecen unas disposiciones transitorias "

  • Decreto número 702 de 2001

“Por medio del cual se modifican las fechas de elección de los Miembros de la Comisión Nacional de Televisión a las que se refieren los decretos 277 del 19 de febrero y 590 del 4 de abril de 2001”.

Año 2000

  • Decreto número 1577 de 2000

Descripción: “Por el cual se reglamenta el procedimiento de selección de los miembros de la Junta Directiva de la Comisión Nacional de Televisión de que tratan los literales b), c) y d) del artículo 1º de la Ley 335 de 1996, modificatorio del artículo 6º de la Ley 182 de 1995, cuando se trate de vacancias temporales por suspensión en el ejercicio del cargo por orden de autoridad judicial competente”.

Año 1999

  • Decreto número 130 de 1999

Descripción: “Por el cual se reglamenta el literal b) del artículo 6º de la Ley 182 de 1995, modificado por el artículo 1º de la Ley 335 de 1996”.

  • Decreto número 131 de 1999

Descripción: “Por el cual se reglamentan los literales c) y d) del artículo 6º de la Ley 182 de 1995, modificado por el artículo 1º de la Ley 335 de 1996”.

  • Decreto número 323 de 1999

Descripción: “Por el cual se modifican y aclaran algunas disposiciones del Decreto 131 del 19 de enero de 1999”.

Jurisprudencia

Sentencias:

  • Sentencia C-226/93
  • Sentencia C-564/95
  • Sentencia C-497/95
  • Sentencia C-569/97
  • Sentencia C-560/2001
  • Sentencia C-492/97
  • Sentencia C-537/97
  • Sentencia C-456/98
  • Sentencia C-445/97
  • Sentencia C-350/97
  • Sentencia C-333/99
  • Sentencia C-310/96
  • Sentencia C-303/99
  • Sentencia C-298/99
  • Sentencia C-200/98
  • Sentencia C-189/94
  • Sentencia C-093/96
  • Sentencia C-073/96
  • Sentencia C-060/2001
  • Sentencia C-011/2001
  • Sentencia C-601/1997
  • Sentencia C-711/1996
  • Sentencia C1172/2001
  • Sentencia C-162/2000
  • Sentencia C-532/2000
  • Sentencia C-598/2000
  • Sentencia C1044/2000

Entidades

Ministerio de Comunicaciones

Misión: Ser el ente rector que direcciona, reglamenta y representa internacionalmente el sector de las comunicaciones y el de tecnologías de la información; promueve el acceso universal como soporte del desarrollo social y económico del nación y ejerce una administración y control eficientes del espectro radioeléctrico y los servicios postales. Visión: Ser una entidad modelo de gestión pública que ejerce un acompañamiento efectivo en el desarrollo del sector como soporte del crecimiento de la economía nacional; ser un eje del desarrollo social de los colombianos a través de la promoción del acceso universal a las tecnologías de la información y las comunicaciones.

Radio Televisión Nacional de Colombia

Misión – Visión: RTVC es una compañía de radio y televisión pública con énfasis en una programación educativa y cultural, que apunta a todas las audiencias con la responsabilidad de difundir valores e informar veraz y objetivamente a los ciudadanos; con el propósito de entretener, educar, dar acceso a la cultura, apoyar la democracia, defender la libertad de expresión, la diversidad cultural y contribuir con la generación de una conciencia crítica colectiva y la construcción de un mejor país.

Comisión de Regulación de Telecomunicaciones – CRT

Misión: La CRT es el organismo regulador del mercado de las telecomunicaciones en Colombia, que tiene el propósito de promover tanto la prestación efectiva de los servicios de telecomunicaciones a todos los usuarios como el desarrollo del sector, dentro de los lineamientos definidos por el estado, a través de la promoción de la competencia y la inversión, la protección a los usuarios y la integración al ámbito internacional.

Visión: En el año 2007, la CRT habrá consolidado un marco regulatorio que permita el desarrollo de las tecnologías de la información y comunicación y la competitividad del sector, facilitando el acceso de la población a la sociedad del conocimiento. Tendrá una alta capacidad de análisis de los mercados de telecomunicaciones y generación de información en beneficio de los usuarios y de todos los agentes del sector. Todas sus actuaciones estarán fundamentadas en sus principios y valores, y seguirá siendo una entidad reconocida en el mercado por su profesionalismo y altos estándares de calidad.

Comisión Nacional de Televisión

Misión: La Comisión Nacional de Televisión es la Entidad del Estado que planea, dirige y desarrolla las políticas en materia de televisión; regula el servicio; y gestiona, interviene y controla el uso del espectro electromagnético utilizado para el servicio de televisión. Visión: La Comisión Nacional de Televisión será identificada como la Entidad del Estado que mediante una sólida gestión administrativa impulsa el desarrollo del servicio público de televisión para garantizar el acceso universal, la calidad del servicio, la competencia y los derechos de los usuarios, valorando la televisión como industria y como un escenario con finalidades educativas, sociales y culturales.

Entidades de Control (CNTV)

Por mandato de la Constitución Política de 1991, los órganos de control que ejercen supervisión sobre las actividades de la Comisión Nacional de Televisión son: CONTRALORIA GENERAL DE LA REPUBLICA- CONTROL FISCAL: Vigila la gestión fiscal de la administración y de los particulares o entidades que manejen fondos o bienes de la Nación, la cual incluye el ejercicio de un control financiero, de gestión y de resultados. Control que ejerce sobre la CNTV fiscalizando entre otras áreas las siguientes: contratación, administrativa y financiera y control interno.. (Constitución Política artículo 267). PROCURADURIA GENERAL DE LA NACION-CONTROL DISCIPLINARIO: Ejerce vigilancia superior de la conducta oficial de quienes desempeñan funciones públicas, ejerciendo el poder disciplinario y adelantando las investigaciones correspondientes en imponiendo las respectivas sanciones conforme a lo dispuesto en la constitución Política en su artículo 277. CONTADURIA GENERAL DE LA NACION-REGULACION CONTABLE: Encargado de llevar la contabilidad y consolidarla con la de las entidades descentralizadas territorialmente o por servicios cualquiera sea el orden al que pertenezca. Uniforma, centraliza y consolida la contabilidad pública, elabora el balance general y determina las normas contables que deben regir en el país. (Constitución Política artículo 354). CONGRESO DE LA REPUBLICA-CONTROL POLITICO: A través del ejercicio del control político que debe ejercer desde el congreso, cita al Director de CNTV a las sesiones para la presentación de los informes que se requieran de conformidad con las disposiciones legales y reglamentarias. (Constitución Política artículo 135).

  • Información tomada de la páginas de la Comisión Nacional de Televisión (www.cntv.org.co), RTVC (www.rtvc.gov.co), el Ministerio de Comunicaciones (www.mincomunicaciones.gov.co) y CRT (www.crt.gov.co).

Información tomada de la página de la Comisión Nacional de Televisión (http://www.cntv.org.co)

Grandes temas

Tv y política

Es innegable el estrecho vínculo que ha tenido la televisión y la política en Colombia, implícito en el mismo carácter estatal del proyecto de adecuación y puesta en marcha del novedoso medio de comunicación, allá en los años cincuenta, durante el Gobierno del General Rojas Pinilla. La inauguración de la televisión al país fue hecha en un marco político evidente, la celebración del primer año del gobierno militar del país, el 13 de Junio de 1954, y aunque impulsada con fines educativos y culturales, el trasfondo político era bastante fuerte, al convertirse en el medio de difusión y propaganda de la gestión del gobierno de la época.

Este inicio de la televisión marcaría una historia ligada a la vida política del país, característica que se evidenció en varios hechos reconocibles del devenir histórico del medio. En primer término, el largo dominio del servicio de televisión por parte del estado, como único dueño, que imprimió un control estatal a la adjudicación de espacios mediados por las mismas directrices y políticas de los diferentes gobiernos que se pueden contar en la historia televisada. Esto delinearía la tensión existente durante muchos años entre lo público y lo privado, entre el dominio y la adjudicación en el sistema estatal inicialmente y mixto mas tarde de la administración de los espacios en televisión. Otro hecho reflejo y consecuencia a la vez de la relación entre televisión y política, es la amplia difusión y convocatoria que han tenido los partidos y grupos políticos al utilizar este medio, haciendo uso de espacios como los noticieros y los programas de opinión con fines propagandísticos. En especial los noticieros entre las décadas de setenta, ochenta y parte de los noventa, que mostraban una clara politización al ser producidos por personajes de la vida política nacional, representantes de los partidos políticos más prominentes. Incluso llegaron a estar divididos en cierto número de noticieros liberales y cierto número conservadores. Aunque pudiera parecer un sesgo, esto permitió a su vez facilitar el diálogo político y el pluralismo informativo.

Con la constitución de 1991, que estableció la libertad de creación de medios de comunicación, nacen los canales privados, ese dejó de lado el protagonismo y control estatal del medio y entraron en juego los grupos económicos más fuertes del país, generando una aparente despolitización de la televisión, sin embargo las tendencias siguen vigentes y no se puede desligar del todo la política de la televisión en Colombia.

La televisión entre lo cultural y lo comercial

Desde los orígenes de la televisión en Colombia se presentó el dilema entre la tendencia hacia lo cultural o hacia lo comercial. La televisión, como estaba planteada en sus inicios, debía tener una misión muy enfocada a lo cultural como lo culto, que en la década de los cincuenta era entendida como la necesidad por parte de la elites intelectuales de alfabetizar e ilustrar a la mayoría del pueblo colombiano, que no conocía las riquezas del conocimiento forjadoras de cultura que brindaba el entorno mundial, y que ahora podía estar al alcance de las manos por medio del televisor.

Por su parte, lo comercial se entendía como la contraposición de lo cultural, aquello que viciaría el objetivo cultural y educador de la televisión con las lógicas de producción capitalista, y su relación con la publicidad, convirtiendo al medio de comunicación en una instrumento publicitario, relegando la tarea de culturizar a las masas incultas de la nación, entonces el debate volvía a ser entre lo público y lo privado.

Varias voces aumentaban el debate, unas provenientes de aquellos que consideraban la primacía del objetivo cultural y educativo de la televisión, otros de aquellos que provenientes del teatro, planteaban que hacer televisión debía ser considerado como arte, por tanto la lógica comercial y por tanto la frivolidad no debían estar implícitas. Por otra parte estaban las voces de los empresarios y comerciantes que veían en la televisión, el medio propicio para crear industria o comercializar sus productos, que estimulados por sus motivaciones privadas pautaban a la conjugación del internes del público, inclinados a la diversión y el entretenimiento y el éxito de programas como producto comercial.

Sin embargo, ante la imposibilidad de cerrarle las puertas a lo comercial en la televisión, se crearon espacios que articularan las tendencias, asignado en arriendo estos espacios a empresas privadas, ya fuera para publicitar productos a través de la presentación de musicales o programas de interés cultural, o espacios para productoras privadas que crearan programas de televisión como industria. Poco a poco el concepto de cultura como lo culto y lo intelectual fue entendiéndose en otras dimensiones más reales que permitió además dar paso a la formulación de legislaciones enfocadas a hacer manejable la tensión comercial-cultural, apuntando a la función social de la televisión, mostrando un interés, tanto de las entidades reguladoras de los espacios en televisión, como de las empresas que representan la parte comercial, que ha tendido a encontrar un equilibrio en dichos debates.

Paulatinamente el arte de hacer televisión se vio más y mas inmerso en la lógica comercial, para los años setenta y ochenta, eran más los espacios adjudicados a la televisión que representaba la industria del entretenimiento, pero se seguía en un sistema mixto de espacios donde el dueños eran el estado y estos se asignaban por licitación. En los noventa se hizo evidente la inversión de capital privado en función de adelantos tecnológicos, y calidad en la producción, además de la puerta que la constitución abrió a la creación de medios privados, con lo cual nacen los canales de los emporios económicos del país. Y finamente, observamos el panorama actual, en el cual los canales y productoras privadas del país, han entrado a las dinámicas de lo global, haciendo alianzas con las grandes cadenas televisivas del continente americano. Pareciera entonces que la lógica pasó a ser puramente comercial, y el debate seguirá abierto.

Televisión y globalización: el panorama de la Tv nacional en el TLC

Con la globalización la televisión colombiana no sólo se ha visto forzada a la integración con las grandes cadenas internacionales como Univisión, Telemundo, Tv Azteca, entre otras, además de la fuerte cuota de enlatados norteamericanos con los que cuenta los espacios en el medio. Ahora con la entrada de las negociaciones de la fase actual de la globalización que establece los tratados de libre comercio (TLC) entre los grupos regionales latinoamericanos con los macrogrupos del Estado Unidos, son muchas las tensiones generadas.

El tratado que actualmente se adelanta entre el grupo regional conformado por Colombia, Perú y Ecuador, con Estado Unidos ha puesto a tambalear la legislación, específicamente en el país, por la cual se regula el porcentaje de cuota nacional que debe haber en pantalla, entrando a negociar una mayor cuota extranjera, específicamente norteamericana. Las voces de protesta no se han hecho esperar, y bajo argumentos que se enfocan a la defensa de la cultura y la identidad nacional que promueve la televisión, rechazan la negociación de estos espacios.

Ante todo, artistas, libretistas, directores, cineastas y otros representantes del gremio de la cultura, han sido los principales opositores a la negociación, alegando que ya es bastante amplia la participación extranjera en los espacios de televisión, además de las ya existentes alianzas, aunque con ellas se garantiza la participación del gremio colombiano. La opinión pública se ha manifestado también en contra de la inclusión de más cuota foránea, sin embargo, y como en todo tema controversial, las opiniones están divididas.

Cronología

La puesta en marcha del proyecto 1953

El General Gustavo Rojas Pinilla comanda el golpe militar por el cual se destituye al presidente Laureano Gómez. La presidencia es asumida por Rojas Pinilla, quien promete al pueblo introducir en el país el nuevo y más influyente medio de comunicación: la televisión, idea que el General había concebido desde 1936 cuando estuvo en Alemania. Así se dan inicio a todos los esfuerzos humanos y técnicos para hacer llegar la señal de televisión a todo el territorio nacional. Un año debería ser el tiempo límite para hacer llegar la señal a los colombianos.

La primera señal de prueba 1954

Para mayo de 1954 ya está todo casi listo. Los equipos, traídos de Estado Unidos y Alemania, están instalados, los aparatos de televisión están a la venta y sólo faltan algunos ajustes. Los primeros ensayos de las pruebas televisivas se hacen el primero de mayo de 1954, emitiendo la señal entre Bogotá y Manizales y algunos ensayos más haciendo trasmisiones desde el almacén de J. Glotttmann en la calle 24 de Bogotá. Las primeras imágenes trasmitidas son una figura en movimiento y la portada del diario El Tiempo de ese día.

La inauguración de la televisión en Colombia 1954

El trece de junio de 1954 es inaugurada oficialmente la Televisión en Colombia, como un servicio prestado directamente por el Estado, en el marco de la celebración del primer año de gobierno del general Gustavo Rojas Pinilla. A las siete pm se escuchan las notas del Himno Nacional de la República, seguido de las palabras del Presidente. Al término del acto inaugural, se emiten los primeros programas de entretenimiento. La emisión dura tres horas y cuarenta y cinco minutos.

La televisión comercial 1955

Durante el primer año, los espacios en televisión habían sido educativos y culturales, y pertenecían exclusivamente al Estado. En agosto de 1955, el Gobierno Nacional decide abrir espacios comerciales, para lo cual se le designa a la Empresa de Televisión Comercial (TVC) el manejo de algunos espacios. La TVC tenía como socios a las cadenas radiales Caracol y Radio Cadena Nacional (RCN). Así se abre campo a la televisión de orden comercial en Colombia. Las empresas interesadas en comercializar sus productos alquilan los espacios y trasmiten programas como revistas musicales y concursos, entre otros. Estos espacios son intercalados con la programación de la Televisora Nacional.

La televisión fuera de los estudios 1958

El dos de mayo de 1958 se hace la primera trasmisión a control remoto en la televisión colombiana. La transmisión fuera de los estudios de la calle 24 por primera vez se hace desde el Teatro Colón de Bogotá, con la presentación de la Novena Sinfonía de Beethoven, ejecutada por la Orquesta Sinfónica Nacional, con el patrocinio de Acerías Paz del Río. Es un gran desafío técnico; tras esta transmisión vendrán muchas más.

Entre la Televisora Nacional e Inravisión 1963

La Televisora Nacional fue la institución que desde los inicios de la Televisión coordinó todo lo relacionado con el medio de comunicación, pues el ente era de carácter estatal. Para el veinte de diciembre de 1963 se crea el Instituto Nacional de Radio y Televisión. El organismo depende entonces del Ministerio de Comunicaciones, que tendrá autonomía patrimonial, administrativa y jurídica. El primer director de Inravisión es César Simmonds Pardo.

Un nuevo canal para la televisión 1966

A comienzos de 1955 se inician las pruebas para poner en funcionamiento un nuevo canal de televisión. Durante el periodo de prueba, el canal presentaría películas de orden cultural proporcionadas por las embajadas acreditadas en el país. La idea era, en los meses siguientes, abrir licitación a firmas comerciales y agencias de publicidad para el manejo del canal. En 1966 la licitación es ganada por Consuelo Salgar de Montejo, mujer de la vida política nacional, quien crea el Canal 9, conocido como Teletigre. A la licitación se presentan también Caracol TV, RTI y Punch. En 1967 comienza a transmitir a nivel local en Bogotá. En 1970 pasa a ser Canal 9, más adelanta Canal A y ahora lo conocemos como Institucional.

De Colombia para el mundo 1968

La estación rastreadora portátil que fue instalada en los predios de Inravisión, trasmite el XXXIX Congreso Eucarístico Internacional, presidido por el Papa Pablo VI en la capital colombiana. Es la primera vez que un Sumo Pontífice visita el país.

Los colombianos ven al hombre en la luna 1969

Gracias a los esfuerzos de Fernando Gómez Agudelo y Leopoldo, Germán y Carlos Pinzón, se instalan televisores y pantallas en las plazas de los pueblos y ciudades del país, desde donde se ve la llegada del hombre a la luna en simultánea con el resto del mundo. La señal es emitida por satélite desde Houston (Estados Unidos), llega a Venezuela y es encadenada con nuestro sistema de televisión desde una retransmisora ubicada en Norte de Santander.

El canal 11 y la televisión educativa 1970

El nueve de febrero de 1970, Antonio Díaz García, ministro de Comunicaciones, inaugura el Canal 11 de televisión educativa popular para adultos, desde el auditorio de Inravisión en el CAN. El veintitrés del mismo mes comienzan los cursos básicos por televisión, diseñados para enseñar a leer, escribir, sumar, restar, multiplicar y dividir. Los cursos serán transmitidos en telecentros instalados en los departamentos del Huila, Cundinamarca, Tolima, Antioquia y Boyacá.

Televisión colombiana por satélite 1970

A través de los satélites de Comsat (Corporación Mundial de Satélites), desde el veinticinco de marzo de 1970 se pone a disposición del mundo entero la señal de televisión que se origina en Colombia. Se instaura el intercambio de programación de la televisión nacional con programas extranjeros que son transmitidos en directo. Así, se abre un valioso intercambio con innegables beneficios para Colombia.

Las primeras imágenes a color 1974

Por iniciativa de Inravisión y las programadoras Punch, Caracol y RTI, el trece de junio de 1974 se transmite la inauguración del mundial de fútbol de Alemania y el partido entre Brasil y Yugoslavia. Las imágenes, emitidas por primera vez a color para Colombia, sólo pueden ser vistas en pantallas gigantes instaladas en el Coliseo El Campín de Bogotá y El Gimnasio del Pueblo en Cali.

La televisión a color para todos 1979

El once de diciembre de 1979, tras la expedición del decreto 2811 de 1978, se pone en operación el nuevo sistema de televisión a color. Audiovisuales prepara la programación inaugural, que comprende, en primer término, las palabras del presidente Julio Cesar Turbay Ayala, seguidas por las imágenes del Palacio de Nariño y un recorrido de cámaras por las diferentes regiones del país.

Los canales regionales 1984

Por medio de una sociedad establecida entre Inravisión y las Empresas Departamentales de Antioquia (EDA), se establece en Antioquia el primer canal regional. La sociedad es establecida el veintiuno de diciembre de 1984. Teleantioquia es inaugurado finalmente el once de agosto de 1985. Con la creación de este canal se abre la puerta para el surgimiento en los años siguientes de otros canales de orden regional, tales como Televalle (conocido ahora como Telepacífico), Telecafé y Canal Capital, entre otros.

La televisión por suscripción 1985

El seis de marzo de 1985, mediante el decreto 666, el gobierno de Belisario Betancur abre la posibilidad de prestar el servicio de televisión por suscripción. Para ello abre licitación hasta el treinta de junio del mismo año. Se presentan quince propuestas. Finalmente la licitación es ganada por TV Cable y entra en funcionamiento el diez y ocho de diciembre de 1987. Cuatro canales eran emitidos por medio de este sistema: Deportes, Latino, Familiar y Cine.

Una nueva legislación 1990

El Congreso de la República, junto con el Presidente César Gaviria Trujillo, en sesión ordinaria, el quince de diciembre de 1990, aprueba la nueva legislación sobre televisión. Esta nueva legislación apunta a fomentar la industria televisiva: amplía los periodos de las concesiones a seis años con el fin de darles estabilidad a las empresas programadoras y productoras.

La Comisión Nacional de Televisión 1995

Para cumplir con el mandato constitucional de 1991 de crear un ente autónomo para vigilar la televisión, nace la Comisión Nacional de Televisión (CNTV), en enero de 1995. Mediante la Ley 182 de 1995, sancionada por el presidente Ernesto Samper, entra en funcionamiento la Comisión. Se establece además la regulación respectiva de la programación y se da paso a los canales privados y a los locales y comunitarios sin ánimo de lucro.

Los nuevos canales privados 1998

A inicios de 1998 entran en funcionamiento los dos nuevos canales privados, Caracol y RCN. En el mismo año se presentan las propuestas para los canales privados de orden local. Participan, entre otros, la Casa Editorial El Tiempo para Bogotá, Ícaro Producciones para Yopal y Telefónica de Pereira para esta misma ciudad. Hay 59 espacios disponibles para canales locales en todo el país. Finalmente, la CNTV adjudica el canal local de televisión con ánimo de lucro para Bogotá a la Casa Editorial El Tiempo, a cambio del pago de catorce millones de dólares por la concesión.

Un nuevo estilo de televisión CityTv 1999

CityTv, el nuevo canal privado de televisión local de la casa Editorial El Tiempo, entra en funcionamiento el diez y nueve de marzo de 1999. El canal presenta a los televidentes capitalinos un nuevo estilo de hacer televisión, con menos programas en estudio y más en la calle. El formato del canal está basado en el modelo del grupo televisivo canadiense ChumCity. Obviamente, el estilo es totalmente adaptado a las características de Bogotá.

La desaparición de las programadoras 2000

La aparición de los canales privados, que tienen como dueños a los dos grandes grupos económicos del país (Santo Domingo y Ardila Lülle), pone en una crisis de varios años a las programadoras que antes se mantenían de las pautas comerciales que dichos grupos retiran al entrar en funcionamiento sus canales. Tras varios intentos por sobrevivir, programadoras como Tevecine, Punch, JES y Cenpro, cesan sus actividades; otras tantas son intervenidas por su estado económico.

Los salvamentos para los canales públicos 2003

La Comisión Nacional de Televisión, adjudica la programación del Canal Uno a cuatro concesionarios: NTC con Colombiana de TV; Programar con RTI; Jorge Barón con Sportsat, y CM&. Cada uno tendrá el veinticinco por ciento de los espacios y el mismo porcentaje en el prime y noticieros. Finalmente el Canal A se convierte en un canal institucional.

El fin de Inravisión 2004

La programadora Audiovisuales y el Instituto Nacional de Radio y Televisión (Inravisión) son liquidados y sustituidos por Radio Televisión Nacional de Colombia (Rtvc), cuyas funciones son: “beneficiar a más colombianos con la educación, la información y el conocimiento; fortalecer la participación ciudadana; promover y resaltar nuestra identidad plural, y abrir espacios a la nueva industria de contenidos”.

Caracol se divide 2004

Caracol Televisón y Caracol Radio, que durante años fueron empresas hermanas, y que pertenecían al Grupo Santo Domingo, se separan: la empresa radial es adquirida por el grupo español Prisa, mientras que la televisiva permanece en manos del poderoso grupo económico colombiano.

Televisión para todos 2005

Por medio del acuerdo 00001, la Comisión Nacional de Televisión garantiza el acceso de los grupos étnicos al servicio público de televisión. “La televisión étnica en el ámbito local será prestada en un área geográfica continua que corresponda a un territorio colectivo de comunidades negras, resguardo indígena, municipio, asociación de municipio o distrito”.

Nace NTN 2008

El tres de noviembre, el conglomerado de medios de RCN Televisión lanza NTN24, un canal internacional de noticias por cable, que tiene como sede a Bogotá.


El cable cambia de dueño 2008

El sistema de televisión por cable, existente en el país desde veintiún años atrás, cambia de dueño. La multinacional mexicana Telmex compra las operaciones de televisión por suscripción de TV Cable Bogotá, Cablecentro, Superview, Teledinámica y Cablepacífico. Se convierte así en el mayor operador de televisión por cable del país.

La internacionalización 2009

NBC Universal adquiere el cuarenta por ciento de RTI Televisión, convirtiéndola en la segunda productora más grande de habla hispana. Otras compañías que se internacionalizan son Telecolombia (Fox de News Corporation compra la mitad) y Teleset (cuyo cincuenta por ciento es adquirido por Sony Pictures).

Nuevos canales, nuevos servicios 2010

A través de los servicios de televisión paga, aparece el canal El Tiempo, de la misma casa editorial. En la actualidad, su información, de énfasis noticioso, llega a más de dos millones de hogares en el país. Ese mismo año, Cablenoticias, su más directo competidor, se convierte en el primer canal del país que llega a los teléfonos celulares con información en directo las veinticuatro horas del día.

La llegada de un gigante 2011

Netflix, el gigante mundial de la televisión por suscripción a través de internet, llega a Colombia. Al poco tiempo, aparecen competidores de formato semejante, entre los que están: Caracol Play, Claro Video, Telmex Video, MovieCity Play y HBO Go.

Adiós a la Comisión; llega la Autoridad 2012

Mediante la ley 1507 de ese año, la criticada Comisión Nacional de Televisión da paso a la Autoridad Nacional de Televisión, que tiene como misión garantizar el pluralismo, la competencia y el servicio de la televisión colombiana. Además, como interlocutor entre el medio y los espectadores, defiende los derechos de estos últimos.

La unificación 2013

Señal Colombia, la Señal Institucional, las emisoras de radio pública nacional, Radiónica y una parte del Canal Uno (y el 25% de su programación), comienzan a ser operados por el Sistema de Medios Públicos.

El Canal Uno despierta 2013

Buscando recuperar la audiencia acaparada por los canales privados, la programación del Canal Uno es rediseñada y desaparecen los espacios de televentas. Se prorrogan hasta 2017 las concesiones de las programadoras Colombiana de Televisión, Jorge Barón, CM& y NTC en ese canal.

El poder de los privados y la estrategia de los públicos 2014

La dupla de los canales Caracol y RCN tiene el 44.58% de la cuota de audiencia, mientras que los otros 89 canales que hay en el país ((incluida la televisión pública) se reparten el restante 55.42%. Para contrarrestar estas cifras, el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (Tic) lanza la campaña “Pásate a la pública”: en asocio con las grandes casas productoras del mundo, se hace programación de alta calidad e interés, para mejorar así el contenido de los canales públicos nacionales.

Llega la TDT 2014

Desde junio de ese año, los colombianos pueden acceder a la Televisión Digital Terrestre (TDT), que remplaza a la versión análoga. Esto implica mejor calidad de la imagen y del sonido y un ahorro en el uso del espectro electromagnético. A ese año, la TDT tiene un cubrimiento de alrededor del cincuenta por ciento del país.

Fuentes

Vínculos de interés

  • Comisión Nacional de Televisión

(www.cntv.org.co)

  • RTVC

(www.rtvc.gov.co)

  • Ministerio de Comunicaciones

(www.mincomunicaciones.gov.co)

  • CRT

(www.crt.gov.co)

RCN (http://www2.rcn.com.co)