Qué es

El populismo es un estilo de gobernar más que una ideología política. Por esta razón, es difícil identificar un vínculo entre una posición política en particular y el populismo. Sin embargo, es posible establecer una serie de factores que caracterizan la mayoría de Gobiernos populistas. Por lo general, el populismo nace de un líder carismático que es percibido como parte del pueblo, y que como parte de este, entiende sus problemas y dificultades. Usualmente, los líderes populistas explotan el sentimiento de opresión de las masas y las injusticias sociales para movilizar tanta gente como puedan, muchas veces en contra de los intereses de las elites sociales o políticas.

Los líderes populistas se mantienen en el poder precisamente por medio de su popularidad, y por esto, es necesario para ellos implementar políticas que favorezcan al pueblo, lo cual muchas veces significa poner a un lado las leyes y normas de la constitución. Muchas veces esto se ve reflejado en la nacionalización de compañías extranjeras, o la decisión de no pagar la deuda externa. Usualmente, las corporaciones y las élites económicas tienden a ser las más afectadas por las políticas populistas, puesto que el líder acude a ellas para crear antagonismos sociales que favorezcan su posición. Así, el líder es percibido como el defensor del pueblo contra los intereses voraces de las corporaciones y las clases altas.

Populismo en la historia

Históricamente, el fenómeno del populismo se ha dado en distintos escenarios políticos, tanto en Latinoamérica como en Norteamérica. Puesto que el populismo nace del carisma de un líder, el fenómeno no está necesariamente atado a un periodo histórico en particular. En efecto, se pueden identificar líderes populistas en periodos históricos remotos, tales como el caso de Espartaco, quien lideró la rebelión contra la Antigua Roma. Más recientemente, el fenómeno se ha podido apreciar en las elecciones de 1992 en los Estados Unidos, cuando Ross Perot asumió una plataforma política de corte populista. En adición, las famosas palabras de Abraham Lincoln, "Gobierno por la gente, de la gente, y para la gente", capturan perfectamente la esencia del espíritu populista.

Latinoamérica ha proporcionado un ambiente particularmente adepto para el populismo. Ecuador tuvo a José María Velasco Ibarra, México a Lázaro Cárdenas, y Perú a Víctor Raúl Haya de la Torre. El caso más obvio, sin embargo, es el del General Juan Perón en Argentina, quien presidió su país en 1946-1951, y de nuevo en 1973. Históricamente, pocos líderes han logrado movilizar a las masas como lo hizo Perón. La audiencia que lograba atraer sus discursos continúa siendo un fenómeno sin repetir en Latinoamérica. Además, Perón contaba con la suerte de tener una esposa tan o más carismática que él. En efecto, Evita Perón se ha convertido en un símbolo nacional en el Argentina, hasta el punto que es imposible hablar de Perón sin mencionar también a Evita.

En el caso Colombiano también es posible identificar una figura central en la historia del populismo. Jorge Eliécer Gaitán continúa siendo uno de los líderes más carismáticos que ha tenido Colombia. Su fuerte condena a la oligarquía Colombiana y su interés por el bienestar del pueblo lo llevó a convertirse en la figura política más popular de su tiempo. Su capacidad oratoria lo llevó a los palcos más concurridos de Bogotá, y pronto, se ganó la lealtad del pueblo. Irónicamente, fue su muerte la que logró movilizar al pueblo colombiano de una manera decisiva.

Neopopulismo latinoamericano

Más recientemente, se ha podido apreciar un nuevo fenómeno dentro del populismo Latinoamericano. Históricamente, los líderes populistas del continente siempre han mostrado una afinidad por políticas izquierdistas; sin embrago, más recientemente han aparecido líderes populistas que han implementado políticas inconfundiblemente de derecha, particularmente en al área económica. Aunque existen muchas opiniones variadas al respecto, varios analistas políticos han llamado este fenómeno neopopulismo. Aunque el estilo continúa siendo el mismo, lo que diferencia un líder neopopulista de un líder populista es su política económica. El caso más claro de este fenómeno es Carlos Menem en Argentina, quien tras asumir el poder a través de métodos populistas, implementó una serie de políticas neoliberales.

Enlaces externos

[http://lasa.international.pitt.edu/Lasa2001/OstiguyPierre.pdf ] Ostiguy, Pierre, Populism, Democracy, And Representation: Multidimensional Concepts And Regime Types In Comparative Politics, University of Notre Dame, Notre Dame, 2001.

Cómo citar este texto

Subgerencia Cultural del Banco de la República. (2015). Populismo (y Neo-populismo). Recuperado de: http://www.banrepcultural.org/blaavirtual/ayudadetareas/politica/populismo_y_neo_populismo