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*Fundadora y directora de las revistas: La mujer (1878), La familia (1884), El domingo de la familia cristiana (1889), El domingo (1898) y Lecturas para el hogar (1905)
*Fundadora y directora de las revistas: La mujer (1878), La familia (1884), El domingo de la familia cristiana (1889), El domingo (1898) y Lecturas para el hogar (1905)


=Biografía=
Escritora nacida en Bogotá, el 5 de mayo de 1833, muerta en la misma ciudad, el 17 de marzo de 1913. Hija del prócer e historiador Joaquín Acosta y Pérez de Guzmán y de la americana Carolina Kemble Rou, Soledad Acosta de Samper realizó sus primeros estudios en Bogotá, en el Colegio de La Merced. A la edad de 12 años fue enviada a Halifax (Nueva Escocia, Canadá), donde al lado de su abuela materna continuó su educación.


De ahí pasó a París, donde permaneció en diversos colegios varios años y frecuentó con su padre las tertulias y reuniones científicas en las que conoció a los más importantes escritores de Europa, con los cuales mantuvo estrecha amistad. De regreso a Colombia, se casó en 1855 con el escritor y político José María Samper Agudelo. Vivió varios años en París, donde comenzó a publicar obras diversas bajo los seudónimos de Aldebarán, Renato, Bertilda y Andina.


==Primeras publicaciones==
==Primeras publicaciones==

Revisión del 18:49 21 nov 2020

Soledad Acosta de Samper
Soledad Acosta by Diaz Picon.jpg
Datos generales
Nombre Soledad Acosta de Samper
Fecha de nacimiento 05 de mayo de 1883
Nacionalidad Colombiana Bandera de Colombia }}
Ocupación Escritora, periodista e historiadora
País de nacimiento Colombia, Bandera de Colombia }}
Ciudad de nacimiento Bogotá
Fecha de fallecimiento 17 de mayo de 1913
País de fallecimiento Colombia, Bandera de Colombia }}
Ciudad de fallecimiento Bogotá
Familia Joaquín Acosta (padre); Carolina Kemble (madre);
Cónyuge José María Samper


Soledad Acosta de Samper fue una de las figuras más representativas de la literatura colombiana durante el siglo XIX. En su prolífica obra se destacan novelas, estudios historiográficos, biografías, obras de teatro y notas periodísticas. Recientemente se ha podido acceder a escritos de carácter privado como diarios, correspondencia y álbumes. Fue también editora y fundadora de cinco revistas dedicadas al público femenino y tradujo cientos de textos académicos y literarios del inglés y del francés, lenguas que dominaba perfectamente. Pese a la relevancia que tuvo en sus años de vida, durante el transcurso del siglo XX su nombre y obra cayeron en el olvido, hasta que en la década de 1990 empezó a ser ampliamente estudiada tanto por sus aportes en materia de literatura como por haber sido pionera en la problematización de los roles de género.

Biografía

Educación y primeros años de vida

Soledad nació en Bogotá, el 5 de mayo de 1833. Hizo parte de la primera generación de neogranadinos que nacieron y crecieron en el marco del régimen republicano. Su padre, Joaquín Acosta, fue historiador, científico y militar. Había luchado por la independencia de la república junto a Simón Bolívar y posteriormente ocupó varios cargos destacados: ingeniero director de caminos de Cundinamarca, encargado de negocios de la Nueva Granada en Ecuador, Ministro en Washington, ministro de relaciones exteriores, diputado al Congreso, catedrático universitario de Química, director del Observatorio Astronómico y el Museo Nacional, además de participar en múltiples proyectos en geología, geografía e historia (Agudelo, 2015). Su madre, Carolina Kemble, era jamaiquina de ascendencia anglosajona, llegó a la Nueva Granada después de haber conocido a su esposo en uno de sus viajes a Estados Unidos. Ya radicada ahí, pudo dedicarse a dictar algunas lecciones de canto y música, conocimientos que había adquirido en París (Agudelo, 2015).

Soledad fue la única hija del matrimonio entre Joaquín Acosta y Catalina Kemble. Debido a las ocupaciones del padre, su infancia transcurrió entre muchos países. A los cinco años la familia se trasladó a Ecuador, luego, a los doce años vivió un año en Halifax (Nueva Escocia, Canadá) donde su abuela materna y después se trasladó junto a sus padres a París (Francia), donde estudió en dos colegios para señoritas (Biblioteca virtual Soledad Acosta de Samper, 2019). La permanencia en varios países hizo posible que Soledad dominara el español, el inglés y el francés a la perfección. Su padre se empeñó en que recibiera la mejor educación posible y ella aprovechó con creces esa oportunidad. Estudiando en Francia se despertó su avidez de conocimiento. Las lecturas proporcionadas en el colegio fueron complementadas con la enorme biblioteca familiar y las tertulias científicas y literarias que constantemente se realizaban en su casa. En estas reuniones conoció importantes personajes de la ciencia, las artes y las humanidades, como: Alexander Von Humboldt, Alphonse de Lamartine, Jules Michelet, Jean-Marie Duhamel, Jean-Baptiste Boussingault y Edme François Jomard (Agudelo, 2015).

En 1850 la familia regresó a Colombia. Con su padre como mentor, Soledad continuó estudiando. El enorme bagaje intelectual que Soledad había logrado adquirir empezó a manifestarse en ejercicios escriturales como la redacción de un diario, que escribía permanentemente para mejorar sus habilidades, y las traducciones de textos académicos y literarios del inglés y del francés. El ambiente en el cual creció favoreció el cultivo de sus cualidades intelectuales, ya que, al ser una joven de la élite bogotana, podía sortear la ociosidad y el aburrimiento de la cotidianidad leyendo historia y literatura (Plata, 2016).

Matrimonio con José María Samper

Cuando Soledad tenía 19 años murió su padre, lo que experimentó con gran dolor, pues su ausencia representaba la pérdida de un guía en sus búsquedas académicas. Pocos meses después conoció a José María Samper, quien se convertiría en su esposo. Soledad encontró en él alguien que reconocía sus capacidades intelectuales y la valoraba más que como madre para sus hijos. José María también era un humanista, fue escritor, periodista y político, lo que fortaleció rápidamente su relación afectiva con Soledad.

Ante la sociedad bogotana José María era un librepensador, masón y anticlerical. Su reputación se debía a haber sido promotor de algunas leyes que habían escandalizado al clero neogranadino como el matrimonio civil y la expulsión de los jesuitas. Sin embargo, tal como cuenta Soledad, su fe religiosa no se distanciaba mucho, era lo que se podría llamar un católico ilustrado, que aceptaba a Dios no por tradición sino debido a una experiencia espiritual personal (Plata, 2016). Como prueba de esto, en 1855 se casaron por medio del rito católico, y con el tiempo sus ideas más radicales se fueron matizando, acercándose cada vez más al conservadurismo. De hecho, hacia la década de 1870 José María participó activamente del proyecto de la Regeneración y trabajó en la ideación de la Constitución conservadora de 1886.

Consolidación como escritora

Cargos en los que se desempeño

  • corresponsal de prensa
  • Fundadora y directora de las revistas: La mujer (1878), La familia (1884), El domingo de la familia cristiana (1889), El domingo (1898) y Lecturas para el hogar (1905)


Primeras publicaciones

A partir de 1858 comenzó a publicar su obra en Biblioteca de Señoritas y en El Mosaico de Bogotá. Ayudó a su marido en los periódicos que él dirigía y envió algunas colaboraciones suyas a diarios del Perú. En 1862 la familia Samper Acosta se trasladó a Lima, donde José María Samper había sido nombrado redactor principal del diario El Comercio. Soledad Acosta respaldó a su marido con una labor periodística y editorial activa. En el Perú fundaron la Revista Americana, un periódico de impresión elegante que no tuvo larga vida. De regreso a Bogotá, José María Samper fue nombrado nuevamente miembro del Congreso y se convirtió en uno de los elementos más importantes de la política colombiana. Soledad Acosta continuó escribiendo y publicando, generalmente en folletines. Al fallecer José María Samper en 1888, Soledad Acosta se trasladó nuevamente a París.


En 1892 fue nombrada delegada oficial de la República de Colombia al IX Congreso Internacional de Americanistas en el Convento de La Rábida, en España, y representó a Colombia en los congresos conmemorativos del Cuarto Centenario del Descubrimiento de América. Doña Soledad se dedicó a apoyar y a orientar a la mujer. Fundó y dirigió varios folletines como La Mujer (18781881), La Familia, Lecturas para el Hogar (1884-1885), El Domingo de la Familia Cristiana (1889-1890), El Domingo (1898-1899) y Lecturas para el Hogar (1905-1906). Allí convive diversidad de temas, desde la antropología, la historia, la moda y la ciencia, hasta la religión y los consejos a la mujer. En muchos de estos folletines doña Soledad era la única editora, directora y colaboradora.


Falleció en 1913 en Bogotá, habiendo alcanzado renombre en Colombia y consideración como una de las más gloriosas figuras de la intelectualidad femenina en América [Ver tomo 4, Literatura, pp. 85 y 161; y tomo 5, Cultura, pp. 183-184 y 267].

Obras destacadas

Soledad Acosta fue una escritora prolífica: más de 20 novelas, 50 narraciones breves y cientos de artículos de la más variada temática conforman su acervo, entre ellos: Novelas y cuadros de la vida suramericana (1869), Biografía del general Joaquín Acosta, Dolores, Cuadros de la vida de una mujer, La Monja, Un chistoso de aldea (1905), Los piratas en Cartagena (1885), El corazón de la mujer, Luz y sombra e Historias de dos familias.

Por: Santiago Samper

Esta biografía fue tomada de la Gran Enciclopedia de Colombia del Círculo de Lectores, tomo de biografías.

Bibliografía

Acosta de Samper, S. (1901). Biografía del general Joaquín Acosta, prócer de la independencia, historiador, geógrafo, hombre científico y filántropo. Bogotá: Librería Colombiana Camacho Roldán-Tamayo.

Tovar Zambrano, B. (1982). El pensamiento historiador colombiano sobre la época colonial". Anuario colombiano de historia social y de la cultura, N 10 , pp. 5-118. Bogotá.

Enlaces Externos

[1] Así describió la vida de Antonio Nariño

[2] Ella no fue una mujer de su época.

[3] Recuerdos y homenajes a la memoria de Soledad Acosta de Samper Soledad Acosta de Samper ya tiene quien la lea.

[4] “La Biblioteca del Hogar”.

[5] La mujer ideal.

[6] Los piratas del Caribe de Soledad Acosta de Samper.

[7] En memoria de su padre.

[8] Revista La Mujer.